Centros Penales informó que los reos fueron movilizados entre los penales de Quezaltepeque e Izalco. / Cortesía Centros Penales


Un total de 1, 042 reos fueron trasladados a los centros penales de Izalco, Quezaltepeque e Ilopango, con el propósito de evitar que sigan enviando órdenes a los delincuentes que se encuentran libres.

Según el informe de la penitenciaría de Quezaltepeque fueron enviados 495 pandilleros de la MS13 al penal de Izalco, mientras que de este último reclusorio fueron trasladados 569 al penal de Quezaltepeque, es decir una especie de intercambio o reorganización penitenciaria,

Mientras que de Quezaltepeque fueron trasladados 18 internas al penal de mujeres en Ilopango. En este penal existe también estado de emergencia, lo cual ha sido cuestionado por un juez de vigilancia penitenciaria.

Fuentes allegadas confirmaron que se trata de reos de mediana peligrosidad y no se descarta movimiento de reos de alta peligrosidad al penal de máxima seguridad de Zacatecoluca.

Para el gabinete de seguridad, los traslados se deben para que se “corten la orden desde adentro del penal hacia el exterior, evitar manuscritos, y mejores controles de seguridad”, dijo el director de penales Osiris Luna.

Agregó que “aquel privado de libertad que no quiera someterse a las reglas a tener un control y siga dando órdenes hacía el exterior y causando algunos problemas dentro de los centros penitenciarios, debemos tomar cartas en el asunto”.

Luna reveló que han descubierto que algunos reos se declaraban ser expandilleros cuando se iban a otro régimen, y ahí aprovechaban para enviar órdenes, según las investigaciones de inteligencia.

Las anteriores autoridades afirmaban que pandilleros presos en los penales de Chalatenango, Ciudad Barrios y San Francisco Gotera, se habían acogido al programa de rehabilitación “Yo Cambio”.

Osiris dijo que al reo que quiere incorporarse a los programas de reinserción y rehabilitación se les dará la oportunidad.

Confirmó que han declarado estado de emergencia en todos los penales y que han suspendido las llamadas en todos los régimenes, antes tenían $50 mensuales para hacer llamadas y dos meses antes de irse las autoridades aumentaron a $100. Algunos tenían hasta 10 números de familiares y amigos, aseguró.