El presidente de Estados Unidos, Donald Trump asegura que frenó ayer la escalada de tensiones con Irán, al considerar que Teherán parecía estar “reculando” después de atacar dos bases estadounidenses en Iraq, en represalia por la muerte de un importante general iraní.

En un discurso televisado desde la Casa Blanca, Trump enfatizó que “no se perdieron vidas estadounidenses o iraquíes” por los misiles lanzados sobre dos bases militares en Iraq.

Si bien prometió imponer “de inmediato” sanciones económicas adicionales contra Irán, acogió con satisfacción las señales de que Teherán “parece estar reculando” en la confrontación de ojo por ojo.

Más tarde, el secretario de Defensa Mark Esper aseguró que tras el ataque del 3 de enero que eliminó al alto general Qasem Soleimani, Estados Unidos ha “restaurado cierto nivel de disuasión” sobre Irán.

Los comentarios enfriaron lo que amenazaba en convertirse en una ebullición descontrolada de tensiones.

Sin embargo, Trump, que enfrenta tanto un juicio político en el Congreso como una dura reelección en noviembre, se ufanó de su decisión de ordenar el asesinato de Soleimani.

El general, un héroe nacional en Irán, fue “el principal terrorista del mundo” y “debería haber sido liquidado hace mucho tiempo”, dijo.

Aunque Trump cerró su mensaje con un llamado a la paz, lo abrió declarando sin rodeos que nunca permitiría a Irán dotarse de un arma nuclear.

 

Irán habla de expulsión

El presidente de Irán, Hasán Rohani, advirtió de que la “respuesta final” al “asesinato” del general Qasem Soleimani será “expulsar a todas las fuerzas de Estados Unidos” de Medio Oriente, sugiriendo que podría haber más acciones además de los ataques de las últimas horas contra bases militares en Iraq.

Irán atacó dos bases con presencia de tropas de Estados Unidos para responder a la muerte de Soleimani, a quien Rohani ha recordado por su “lucha heroica” contra grupos terroristas como Estado Islámico o Al Qaeda. “Si no fuese por su guerra contra el terrorismo, las capitales europeas estarían en gran peligro”, ha afirmado en Twitter.

“Nuestra respuesta final a su asesinato será expulsar a las fuerzas de Estados Unidos de la región”, añadió, en un mensaje que subraya otros avisos similares lanzados ayer durante una reunión del Gobierno de Irán y en los que ha clamado “venganza”.

“Cortaron la mano del querido general Soleimani en esta atrocidad. Nuestra venganza será cortar los pies de Estados Unidos de esta región”, ha asegurado Rohani, según los medios oficiales.