Presidente de Estados Unidos, Donald Trump./AFP.


El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirmó este viernes que lo peor de la crisis del coronavirus quedó atrás, en un momento en que la pandemia causa estragos en América Latina, sobre todo en Brasil, tercer país del mundo con más muertos por covid-19.

Estados Unidos es el lugar más golpeado por la epidemia, con cerca de 108.000 de las 390.000 muertes que dejó el coronavirus desde que fue detectado en China el año pasado.

Pero Trump, que busca la reelección en noviembre, adoptó un tono optimista y celebró las cifras de empleo publicadas este viernes. Con una economía estadounidense en pleno proceso de reactivación tras el confinamiento, el desempleo bajó en mayo a 13,3%, después de una racha de dos meses al alza que llevó la tasa de paro de un 3,5% en febrero a un 14,7% en abril.

Trump declaró que Estados Unidos "ha superado en gran medida" la crisis, en un momento en que Francia declaró que la epidemia de covid-19 está "controlada" en su territorio.

América Latina se encuentra, sin embargo, en su peor momento desde el inicio de la pandemia, con cifras alarmantes en Brasil, Chile, México y Perú, entre otros países.

Con 34.021 fallecidos y casi 615.000 casos, Brasil es el país más afectado de la región y es la tercera nación con más muertes después de Estados Unidos y el Reino Unido.

El país de 210 millones de habitantes no aplicó ninguna política contra el virus a nivel nacional y las medidas de contención decretadas por algunos estados y municipios fueron en general menos estrictas que en la mayoría de países europeos.

"Nada indica que la curva [de mortalidad] se reducirá" a corto plazo en Brasil, advirtió el presidente de la Federación internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (FICE), Francesc Roca, en declaraciones a la PAF.

Ante el avance de la epidemia, Naciones Unidas y la Organización de Estados Americanos (OEA) alertaron sobre el "grave riesgo" en que están los indígenas de la Amazonia, hogar de 420 pueblos originarios, 60 de ellos en aislamiento voluntario.

El cacique Raoni figura emblemática de la resistencia indígena en Brasil, acusa al presidente Jair Bolsonaro de "aprovechar" la pandemia para impulsar proyectos que suponen la desaparición de los pueblos originarios.

Por su parte, México reportó el jueves, por segundo día consecutivo, un máximo de contagios diarios (4.442) y 816 decesos más, llevando el total a 105.680 casos y 12.545 fallecidos.

El país empezó a aflojar el confinamiento tras más de dos meses y su presidente, Andrés Manuel López Obrador, pidió a la población que no "relaje la disciplina" pero que tampoco caiga en la "psicosis".

Entretanto, en Perú, segundo país de la región en número de casos y tercero en decesos, se superaron el jueves los 5.000 fallecidos, y el sistema sanitario está al borde del colapso, con más de 9.000 personas hospitalizadas.

En Chile, las muertes por el coronavirus subieron un 50% en una semana y suman 1.448 con 122.499 casos confirmados.

- Europa hacia una reapertura de fronteras -
En Europa, la Unión Europea (UE) indicó que podría abrir las fronteras a viajeros de fuera del continente a principios de julio, con el verano boreal en ciernes.

"Deberíamos considerar un levantamiento gradual de las restricciones a los viajes no esenciales hacia la UE a principios de julio", dijo Ylva Johansson, el comisionado de Asuntos Internos del bloque.

En Francia, "el virus continúa circulando en ciertas regiones (...), pero circula a baja velocidad", declaró François Delfraissy, presidente del consejo científico que asesora al gobierno.

Según el experto, "se puede decir, razonablemente, que la epidemia está bajo control" en el país, donde la covid-19 ha causado 29.065 muertos y 189.441 casos.

En tanto el Reino Unido superó este viernes las 40.000 muertes por el coronavirus.

- Horizonte económico turbio -
Trump celebró la mejora de las cifras de empleo, en un momento en que la crisis sanitaria provocada por la covid-19 se suma a la económica, tras más dos meses de actividad global paralizada.

"Teníamos la mayor economía de la historia. Y esa fuerza nos permitió superar esta horrible pandemia", dijo el mandatario en un tono electoral de cara a las presidenciales de noviembre.

En España, otro de los países europeos más afectados con más de 27.000 muertos y donde se decretó una cuarentena estricta desde el 14 de marzo, la producción industrial se desplomó un 33,6% en abril a ritmo internanual, con un especial impacto en el sector automotor.

El constructor de automóviles japonés Nissan anunció que cerrará su planta de Barcelona (noreste), lo que se traducirá en la supresión de 3.000 empleos directos y 22.000 indirectos, según los sindicatos, mientras que su competidor, el estadounidense Ford, planea recortar 350 puestos en su planta de Valencia (este) con un programa de bajas voluntarias.