La Unidad de Análisis y Seguimiento de Presupuesto (UASP) de la Asamblea Legislativa recomienda exigir que se ejecute la inversión pública, disminuir el gasto en bienes y servicios superfluos, regular las contrataciones y establecer un calendario de ejecución en el estudio que se realice al proyecto de presupuesto general del Estado de 2020.

El estudio entregado a los diputados de la Comisión de Hacienda y Especial del Presupuesto señala que no se alcanzarán metas macroeconómicas ni en 2019, ni en el escenario que el Ministerio de Hacienda ha previsto en el plan de gastos de 2020.

La UASP explica que el presupuesto 2020 no contiene proyectos que incentiven y sustenten el crecimiento económico estimado, del 2.5 %, ya que el 89.2 % de los proyectos de inversión pública programados son de arrastre, es decir, su ejecución viene desde 2019, y la inversión real propuesta del Plan Cuscatlán aún se encuentra en perfiles de inversión, de acuerdo al Marco Fiscal de Mediano y Largo Plazo.

Los analistas legislativos sostienen que los nuevos proyectos no son “de mayor impacto”, ya que son de infraestructura mínima. El informe cita que la inversión de arrastre suma $844.3 millones y la nueva inversión suma $102.6 millones.

La Comisión de Hacienda aún no finaliza el estudio del proyecto de presupuesto general del país para 2020. / DEM


Según la UASP, que será parte del estudio que harán los diputados al plan de gastos presentado por el gobierno actual, fundamentar el crecimiento en el consumo y las remesas familiares plantea un escenario vulnerable o inseguro, ya que cualquier “shock” negativo en la economía de los Estados Unidos podría perjudicar ese crecimiento económico proyectado y, por consiguiente, las finanzas públicas.

El escenario vulnerable que plantea el estudio es acompañado de recomendaciones.

Así, sugiere “incentivar la economía interno”, acelerando la ejecución del programa de inversión pública para el año 2020, incentivar los procesos de licitación dado que la mayoría posee financiamiento aprobado e incentivar también la ejecución de megaobras de infraestructura contenida en el Marco Fiscal de Mediano y Largo Plazo que forman parte del Plan Cuscatlán. “Con ello se podría dar sustentabilidad y sostenibilidad a la economía”, reza el documento.

El estudio advierte que la tasa de crecimiento también podría ser afectada por el lento crecimiento de la inversión pública, ya que hasta agosto de 2019 se ha ejecutado 41 % de lo programado, un retraso del 59 %. Según la UASP, con ello, el marco macroeconómico con el que se fundamenta el presupuesto para 2020 no podría cumplirse.

Así mismo, indica el análisis, es necesario incentivar el cumplimiento del artículo 39-C de la Ley de Adquisiciones y Contrataciones Públicas (Lacap) que obliga que el 25 % compras de bienes y servicios se hagan a micros y pequeñas empresas, así como incentivar programas de desarrollo agropecuario para dinamizar la seguridad alimentaria.