La venta de autos nuevos cayó hasta un 100 % durante el confinamiento por el covid-19, pero en plena etapa de recuperación de la economía el sector busca reacomodarse a la nueva realidad mientras comienza a despuntar la venta de vehículos de trabajo.

Las importaciones de vehículos nuevos no se detuvieron durante los primeros meses de 2020, ya que la Dirección General de Aduanas (DGA) reporta que entre enero y julio pasado al país ingresaron 4,720 unidades que significaron $80.27 millones.

Si el ingreso de vehículos nuevos mantiene el ritmo observado a julio, es posible que no alcance el comportamiento mostrado al término de 2019 cuando al país ingresaron 14,562 unidades por un valor de $237.28 millones, una cifra que mostró un incremento de 1,175 automóviles frente a los 13,387 reportados al cierre de 2018.

José Roberto Renderos, gerente de marca de Nissan -distribuida por Grupo Q-, explicó que el sector comienza a mostrar una tibia recuperación, aliviado por el despegue de la demanda de vehículos de uso comercial.

El sector retomó actividades desde junio y adoptó nuevas medidas sanitarias, no solo en los “showrooms” –salas de exhibición de los vehículos-, sino en la operación completa que incluye a los servicios de taller y oficinas administrativas donde se aplican protocolos como la toma de temperatura, procesos de desinfección constante y se exige el uso de mascarillas.

El sector espera recuperar algo del ritmo en lo que resta del año, pero los actores están convencidos de que 2020 cerrará en rojo. “En El Salvador llegamos a una caída del 100 % por las medidas que se tomaron al inicio (de la pandemia), luego pasamos desde un 50 % hasta una caída del 30 %, aproximadamente. Hemos notado que las ventas (en la etapa de reactivación) se están concentrando en los vehículos de trabajo como pick ups, camiones y microbuses”, explicó Renderos.

Napoleón Mariona, director general de Inchcape El Salvador (distribuidor de la marca Mercedes-Benz), explicó que hay conciencia de que 2020 no será un buen año, pero que esperan que haya un mejor dinamismo para 2021 y 2022. “Estimamos que el mercado repunte nuevamente y en el segmento de autos premium la estrategia es de adaptarse a esa nueva realidad, pero de diferenciarse con un portafolio de servicios diferente al que generalmente se acostumbra”, dijo.

Inchcape es el nuevo jugador de la plaza y busca posicionarse, además del segmento de lujo, en el de vans, mediante la comercialización de Sprinter el cual consideran tiene mucho potencial.

En general, entre las actividades económicas que están demandando unidades de fábrica están, principalmente, las que no pararon en la pandemia y pertenecen a rubros esenciales de la economía e incluso de quienes vieron en la crisis sanitaria una oportunidad para iniciar un negocio, además de aquellas relacionado con la logística.

Sandra Hernández de Velásquez, gerente de marca de Chevrolet -distribuida por Excel Automotriz, reforzó el hecho de que la oferta de la línea comercial, en general, ha tenido una recuperación mucho más rápida que la del resto de segmentos.

“En el caso de Excel, con su marca Chevrolet, justo en febrero de 2020 lanzamos nuestra totalmente nueva línea comercial N400, tanto en su versión panel como en la versión microbús, que sin duda ha venido a revolucionar el mercado, dada su versatilidad, comodidad, seguridad, todo esto a un precio muy competitivo”, explicó.

De Velásquez detalló que el N400 ha tenido una buena aceptación entre clientes como distribuidoras, emprendedores y empresas que buscan formas diferentes de hacer llegar sus productos a cada hogar salvadoreño.

Renderos, de Nissan, detalló que, en cambio el segmento de sedanes y camionetas, son –en parte- los ejecutivos de las empresas que no pararon durante la emergencia y han comprado su carro para seguir sus planes de renovación.



Gobierno frena compras

La desaceleración del mercado de autos nuevos alcanzó a las compras del Gobierno. Fuentes del sector confirman que las carteras de Estado cancelaron varias licitaciones.

“Nos notificaron formalmente”, explicó Renderos, que la razón que se ofreció en su momento es que los fondos iban a redirigirse para la atención de la pandemia. Sin embargo, consideró que el sector comienza a despertar.

“Han empezado a darse compras, pero a menor escala”, agregó el ejecutivo de Grupo Q, que explicó que el Gobierno gestiona pedidos fuertes de 50 o 100 unidades, pero que ahora lo hace con bloques de 10 o 15.

Renderos consideró que es muy prematuro decir con claridad cómo se comportará 2021 para el sector, pero que es claro que no tendrá que compararse con 2020, sino con 2019, un año que no fue marcado por la pandemia.

 

Compañías operan con protocolos sanitarios y estrategias

 

Desinfección

Las distribuidoras han reforzado sus estrategias de desinfección en apego a lo estipulado en los protocolos girados por el Ministerio de Salud, algunos incluso utilizan ozono para para desinfectar autos en el taller.

 

 

Estrategias

Grupo Q impulsa el “renting”, una modalidad permite que un usuario particular pueda alquilar un vehículo por un plazo determinado, por ejemplo de tres o cuatro años, pagando un canon de arrendamiento fijo.

 

Tendencia mundial

La baja actividad por la pandemia impactó al segmento automotriz en todo el mundo. La estrepitosa caída en la movilidad y el desplome de las economías han provocado una desaceleración histórica en el sector.