La bancada arenera se reunió por separado, antes de que se reanudara la sesión plenaria, por la tarde. / DEM


Los diputados de ARENA aceptaron ayer que sufrieron diferencias dentro de su bancada, al analizar la aprobación o no de la emisión de $152 millones de títulos valores para seguridad y pensiones de militares. Pero querían evitar que ello se tildara como una ruptura.

El diputado Mauricio Vargas reconoció, por la mañana, que siempre que intentaban votar se encontraban con “dos posiciones”. “Yo le digo que sí, usted dice que no. En esa discusión estamos. Estamos diciendo que estamos en los consensos y disensos tratando de llegar a una decisión que llene el organismo colegiado (ARENA), que no sea porque hay un voto más”, dijo.

¿Por qué no dejan que sus diputados voten libremente? “Esto no es Sodoma y Gomorra”, respondió.

Vargas hablaba de lograr en ARENA “una mayoría lo suficientemente amplia”.

¿Están en empate? “El sí (por los bonos) está más cerca que el no”, respondió el militar retirado quien afirmó que todos los areneros apoyaban la aprobación de los bonos. La diferencia, según un diputado, estaba en el nivel de fiscalización que solicitaba cada uno de los grupos.

“Lo que pasa es que los medios no han centrado objetivamente el problema”, se quejó Vargas, luego de cuestionar auditorías de la Corte de Cuentas en los casos El Chaparral, Puerto La Unión y Sistema Integrado de Transporte del Área Metropolitana de San Salvador (Sitramss).

La aprobación en ARENA no llegó antes para evitar que se tildara como “quiebre” de la bancada. “Ayer (miércoles) fue imposible un consenso, tuvimos que escuchar opciones, no había una mayoría dominante. Si había una mayoría era muy raquítica para decir ‘Así nos vamos a ir’, podía haber representado como una especie de quiebre en la fracción, la mitad que sí, la mitad que no, y no íbamos a permitir eso”, reveló. A esto no le quiso llamar “división”, sino “discrepancias”.

Ninguno quiso detallar el contenido de esas discrepancias. “Todos estamos por mayor fiscalización”, respondió.

Por la mañana, la fracción construía un proyecto de consenso que se presentaría al FMLN bajo el lema “Lo toman o lo dejan”. Luego de unos cambios, finalmente, votaron por la emisión de deuda para enfrentar las urgencias por la inseguridad.