Así consiguió esta salvadoreña cautivar a Los Ángeles con su venta de flores

"Cuando ya no aguanté el estrés del trabajo, renuncié y decidí abrir mi propia florería en abril de 2018. Saqué mis ahorros que hice para la jubilación y abrí mi florería en el sur de Los Ángeles”, así cuenta la salvadoreña Brenda Servín, de 33 años, cómo tomó la decisión de emprender y abrir "Brenda’s Beauty Flowers” su propio negocio de flores, para tener mejores condiciones de vida, pasar más tiempo con su familia y trabajar con algo que le encanta mucho: los arreglos florales. La salvadoreña llegó a Los Ángeles cuando tenía 17 años, y su única ilusión era tener mayores oportunidades para desarrollarse en el ámbito del modelaje y la actuación, pero con el tiempo esta meta se complicó, las cosas no salían como ella deseaba y las oportunidades eran escasas. "Mi sueño era ser actriz de televisión y modelo, pero es un ambiente muy difícil. Fui a muchos castings y aunque conseguí hacer algunas cosas, tuve que ponerme a trabajar”, contó la salvadoreña a diario La Opinión. Pese a haber tenido oportunidades laborales como presentadora en programas como Conexión Musical de Mundo FOX, Lo Nuestro TV en Centroamérica TV y en Ritmo Sin Fronteras del canal 57 LATV, la salvadoreña expresó que estos momentos eran muy escasos, y difícilmente podría vivir del dinero que ganaba en sus apariciones fugaces en la TV, razón principal por el cual tenía que buscar otros empleos. Para Brenda era muy difícil conseguir un empleo cuando llegó a Los Ángeles, porque no sabía hablar inglés, y eso la limitaba de gran manera en su búsqueda laboral. Antes de emprender con su florería, trabajó durante un tiempo en un supermercado, pero el salario era malo y las jornadas laborales eran extensas, lo cual impedía su deseo de superación y le dificultaba pasar mayor tiempo junto a su familia. "Yo limpiaba y embolsaba productos. No hablar inglés me limitaba para conseguir otros empleos. Como me encantan las flores, en mi hora del almuerzo siempre iba al puesto de flores de la tienda a aprender cómo hacer los arreglos”. Con el tiempo Brenda comenzó a trabajar en el área de las flores del supermercado, donde aprendió más sobre los arreglos y las decoraciones, pero después de siete años, ella tomó la decisión de renunciar, y así dar inicio a su travesía de emprendedora, y decidió invertir sus ahorros para abrir su propia tienda.