El retraso en el proceso de contratación de la empresa que implementará el sistema de voto electrónico ha generado diferencias entre los magistrados del Tribunal Supremo Electoral (TSE) sobre las ventajas o desventajas de haber optado por una contratación competitiva por invitación, en lugar de una sin competencia.
La magistrada presidenta del Tribunal, Dora de Barahona, aseveró que para el voto electrónico que se implementará en 2024 "asegurará que tenga las características de ser un voto transparente y limpio”.
Barahona inicialmente votó para realizar una contratación directa sin competencia, sin embargo, después apoyó que se realice con competencia.
Ayer, defendió su voto, explicando que para ella "es importante la competencia, tener el abanico de ofertas para poder decidir, porque no son tomates los que vamos a comprar, es un sistema que se va a aplicar”. La funcionaria mencionó que espera que la contratación finalice en junio.
Olivo: mejores precios y calidad.
El magistrado Julio Olivo explicó a Diario El Mundo que la competencia entre empresas contribuye "a obtener precios más competitivos y productos de mejor calidad”.
Señaló que la contratación con competencia propicia un "proceso más transparente” y que el TSE "está cumpliendo con las etapas” de la Ley de Compras Públicas. Preocupación por retraso.
El magistrado Guillermo Wellman externó su preocupación sobre el retraso en la contratación, pues considera que es posible que se ponga "en riesgo” el voto de los salvadoreños en el exterior.
"Creo que, si no se le mete el pie al acelerador, podríamos poner en riesgo el voto en el exterior, la participación de los salvadoreños en el exterior”, expresó.
Wellman enfatizó que la Ley Especial para el Ejercicio del Sufragio en el Extranjero establece que ocho meses antes de las elecciones el sistema electrónico debía estar listo, plazo que vence el 3 de junio de 2023. Con ello, calculó que podría culminar en agosto.
Advirtió que el colegiado debe prever la complicación de la época navideña para la movilización del equipo de voto electrónico presencial. "Las empresas tienen que preparar toda una logística, se acerca la navidad, noviembre y diciembre no se puede hablar de traslado de máquinas, esto se le va a venir a complicar al Tribunal”, dijo.
El magistrado Noel Orellana, por su parte, aseguró que él es optimista y quiere pensar que no está en riesgo el voto desde el exterior, "pero va a depender de la actitud que tomemos cada uno de los magistrados”.
Los magistrados Dora de Barahona y Guillermo Wellman descartaron ayer que las diferencias se deban a interés personales y lo atribuyeron a diferencias de criterios.
De acuerdo al calendario electoral definido por el TSE, la contratación del voto electrónico debió culminar el 15 de marzo de 2023.