El sector agrícola ha pasado por diversos desafíos en el último año, entre eventos climáticos externos y alza en el precio de insumos, situaciones a la que se suma la falta de mano de obra, que ya preocupa a los productores.
En diciembre pasado, los productores de granos básicos y de azúcar advirtieron sobre una disminución de la mano de obra en los sectores a los que pertenecen, generada por diversos factores como la falta de tierras propias, la migración y la búsqueda de mejores ingresos.
El presidente de la Asociación de Productores de Caña de Azúcar de El Salvador (Procaña), Óscar Orellana, aseguró que el sector azucarero aún posee problemas con la mano de obra, una situación que provocó que los azucareros se inclinaran por mecanizar la corta de la caña.
"Todos los trabajos agrícolas estamos teniendo problemas y la opción ahí es mecanizar, hacer todo con tractores y eso, en algún momento, va a impactar la economía rural”, indicó.
El vocero de Procaña aseguró que, aunque se avance con la introducción de máquinas en la corta de caña de azúcar, que hasta ahora ya abarca entre el 35 % y el 40 % del proceso, existen áreas de los cultivos en los que los rozadores son indispensables por el espacio de trabajo.
Menos recursos.
Ángel Coto, presidente de la Confederación de Federaciones de la Reforma Agraria Salvadoreña (Confras), indicó que una parte de la reducción de los empleos en el sector agrícola se debe a que el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) ya no adquiere la semilla certificada que elaboran los pequeños productores.
A esto se suma el alto costo de los insumos reportados en 2022, que llevó a pasar de invertir $450 por cada manzana de maíz, a $800.
La Encuesta de Hogares y Propósitos Múltiples (EHPM) de 2021 señaló que en el país unas 373,535 personas se dedicaban a tareas agrícolas, forestales, pecuarias, a la crianza de peces, apicultura, entre otras, de los cuales solo un 20 % era dueña de tierras propias.
Bajo el análisis de la Confederación, en el país hay un poco más de un millón de productores, de los cuales 400,000 producen en tierras alquiladas, un factor que según la entidad disminuye las aspiraciones para sembrar en El Salvador.
Menor acceso al ISSS.
Los datos del Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS) señalan que hubo una reducción de 574 puestos laborales en 2022, al comparar los 13,733 empleos registrados en enero con los 13,159 de septiembre del año pasado.
Dentro del dato, más de 13,000 personas reportaron un salario cotizado de $498.48 en septiembre del 2022, $12.78 más que en enero, cuando el ISSS registró un promedio de $476.70.
No obstante, que algunos productores del campo ganen más de $400 no significa que todos estén bajo la misma situación, pues muchos se encuentran bajo la figura de jornales temporales, quienes reciben un sueldo diario por tarea.
Los salarios mínimos en el sector agrícola y azucarero llevan a los trabajadores del campo a ganar entre $8.96 y $8 diarios, y un poco más de $1 por hora.
El salario mínimo de un recolector de caña de azúcar es de $272.55 al mes, mientras que para el sector agropecuario y otras actividades similares está fijado en $243.46 mensuales.
Confras advirtió que si la mano de obra sigue disminuyendo en el país, también se reducirá la producción de alimentos. "Estamos motivando a nuestros jóvenes a que se queden en su territorio, a que no emigren para que puedan garantizar la alimentación de las familias salvadoreñas”, agregó.
El dato
Procaña aseguró que la falta de mano de obra para la corta de la caña de azúcar ha llevado a los productores a utilizar maquinaria, sin embargo destacaron la función de los trabajadores.