Estas son cuatro tradiciones que los salvadoreños mantienen vigentes en la víspera de Año Nuevo

Celebrar el Año Nuevo es una tradición que incluye varias costumbres adoptadas en muchos países alrededor del mundo, la cual son festividades que suele incluir juegos pirotécnicos, expresiones de afecto, mensajes de buenos deseos y otras actividades propias de cada familia o país, pero sobre todo es un momento donde las personas aprovechan para reunirse y recibir un nuevo año junto a sus seres queridos. En El Salvador esta festividad no es la excepción, los hogares se reúnen desde muy temprano para coordinar y preparar las diferentes actividades que realizarán durante la noche vieja. Existen muchas maneras de cómo los salvadoreños despiden el año viejo y reciben un nuevo año, pero comúnmente hay cuatro tradiciones principales que muchos salvadoreños realizan cuando el reloj marca las 12:00 a.m. del día 1 de enero. Estas cuatro tradiciones son: Los abrazos: es quizá la tradición más importante y emblemática en las familias salvadoreños para recibir el Año Nuevo, debido a que cuando el reloj marca las 12 en punto de la medianoche, las personas suelen dar abrazos a sus familiares y seres queridos en gesto de alegría, felicidad y buena vibras para el próximo año que esta comenzando. Un brindis: muchas familias también optan por realizar los famosos "brindis”, en los cuales chocan sus copas por un objetivo en común, a manera de sinónimo de agradecimiento, celebración o meta que buscan alcanzar el próximo año. Las personas suelen realizar este brindis con bebidas alcohólicas y no alcohólicas, dependiendo de los gustos de cada persona. Quema de pólvora: la quema de pólvora es otra de las tradiciones más representativas entre los salvadoreños durante la noche del 31 de diciembre, cuando las personas iluminan los cielos con diferentes fuegos artificiales para despedir un año más y para dar la bienvenida con alegría al año que comienza. Oraciones: dependiendo de las religiones y costumbres, muchas familias salvadoreñas realizan oraciones grupales, familiares o personales al momento que el reloj marca la media noche, esto con la finalidad de agradecer por todo lo que vivieron y lograron durante el año que está terminando, pero también para hacer sus peticiones, metas y compromisos a realizar en el próximo año que está por comenzar.