¿Cuáles son las prioridades?

Miércoles 02, Marzo 2022 - 12:00 AM
Opinion
Gran bombo y platillo mediático tuvo la reciente puesta en escena de la inauguración del flamante Hospital Nacional Veterinario "Chivo Pets”, obra relámpago anunciada por Bukele apenas en octubre pasado y cuya primera piedra colocó el 1 de noviembre de 2021 mientras las familias se preparaban para la triste conmemoración del día de finados; dolorosa efemérides para honrar a los miles de víctimas tanto de la violencia criminal que azota al país, del creciente ascenso de fallecidos por dolencias crónicas indebidamente tratadas, así como por los cruentos contagios del Covid19. Este novedoso hospital para mascotas, según Bukele, fue construido con cuatro millones de dólares de "ganancias” del Bitcoin; sin embargo, hasta hoy, por las caídas de ese criptoactivo el gobierno ha perdido más de 20 millones de dólares. El hospital veterinario está enclavado en el municipio más rico del país, Antiguo Cuscatlán, en las inmediaciones de los más modernos centros comerciales, lugar intrincado y de difícil acceso para sectores populares. Según entendidos, si en verdad se buscaba favorecer las necesidades de amplios sectores el lugar que ofrecía mayor accesibilidad y cobertura por su amplitud es el Parque Zoológico Nacional. En este Hospital, de acuerdo a la propaganda oficial, trabajarán más de trescientas personas entre especialistas, personal de apoyo y servicios generales. Este proyecto elitista, financiado con fondos públicos, tiene pago obligatorio por servicios que solo es simbólico para los que tienen la billetera digital para el manejo del Bitcoin "Chivo Wallet”, aplicación ampliamente denunciada por miles de salvadoreños por falta de seguridad en sus transacciones y sus escasos mecanismos de verificación, por lo que más que el servicio veterinario pareciera que lo que se promociona es realmente la aplicación. La extraordinaria premura con la que se anunció y construyó este flamante hospital para perros, como popularmente se le conoce, ha puesto en la picota la crítica situación de abandono en los servicios de salud pública debido a los tres años de inexplicable retraso en la construcción del nuevo Hospital Rosales, principal centro de atención de tercer nivel del país. Esta obra tiene por financiamiento un crédito del BID de ciento setenta millones de dólares para poner en funcionamiento dos grandes hospitales, y fue aprobado, planeado y diseñado desde junio de 2018. El otro nosocomio para atender las necesidades de salud de la región norte central, estaba previsto a construirse en las inmediaciones de Nejapa. Las severas irregularidades sobre la construcción del nuevo Hospital Rosales incluyen el desvío millonario de $ 22,294,244.00 del crédito del BID, bajo el pretexto gubernamental de haberlos utilizado durante la pandemia. El banco certificó que el gobierno recibió ese adelanto de fondos en marzo de 2020, sin embargo, a la fecha el sistema de auditoría del BID no encontró evidencia suficiente y apropiada para verificar la existencia física de todos los bienes adquiridos por ese monto, falla que el MINSAL atribuye a la falta de inventarios. Cualquier administrador sabe que el proceso de ingreso de bienes al inventario de activo fijo, mediante la asignación del código respectivo, es inmediato a la salida de bodega. Es muy grave la decisión del MINSAL de anular el proceso de licitación pública para construir el Hospital Rosales, iniciado por ellos mismos en marzo de 2021. A este proceso le hicieron modificaciones en septiembre y hoy lo declaran sin lugar aduciendo que se reformularán las especificaciones técnicas "para que responda a los nuevos retos”. En esa "reformulación”, casualmente asignan la obra a la recién creada Dirección de Obras Municipales (DOM) que tiene una regulación ad hoc para las contrataciones, lo que representa un grave retroceso en transparencia. El hospital más cool para mascotas sería una novedad si el Hospital Rosales estuviera construido, y si el país contara con un hospital especializado en nefrología, para tratar la insuficiencia renal, hemodiálisis y trasplante renal; dolencia que actualmente afecta a más del 10% de la población, con una mortalidad de entre 3 y 6 fallecidos diarios. Las luces, las cámaras y las puestas en escena para salir del paso de las crisis mediáticas del gobierno, continúan siendo la constante, como también siguen siendo constantes, y sin solución, los problemas reales del país: la crisis económica, los desaparecidos, el desempleo y todo lo demás.