Salvadoreños llevan extraños “Trompocoyotes” en sus maletas y artesanías envueltas de “nostalgia y picardía”
Sábado 07, Enero 2023 - 3:00 PM
Aventurarse en el mercado de artesanías ExCuartel en la capital, acerca a muchos salvadoreños a revivir su infancia y llevarse entre regalos trocitos de El Salvador.
El negocio de Esmeralda Elizabeth Flores es tan colorido como la campiña salvadoreña, lleno de colores y de una variedad grande de juguetes, ropa, recuerdos, adornos, calzados y regalos únicos que llevan impregnados la nostalgia salvadoreña, también esa pícara manera de hacer reír a todo el mundo.
Una muestra de este conjunto está disponible en "Regalo de Dios”, el nombre del negocio de artesanías de Esmeralda Flores, una emprendedora que contó a Diario EL MUNDO lo valioso y simbólico que puede convertirse una pieza artesanal para reavivar el recuerdo y la nostalgia que miles de compatriotas experimentan cuando visitan el mercado ExCuartel, en San salvador, y se llevan entre sus maletas los famosos "souvenir” para familiares y amigos en el extranjero.
Uno de los mayores atractivos para los hermanos lejanos y extranjeros, son las artesanías que llevan ese colorido y característica "pícara”, lo cual llama mucho la atención de los compatriotas que se asombran por el curioso significado de los productos que van desde piezas para entretenerse hasta accesorios y prendas para pregonar sus raíces salvadoreñas.
Flores comenta que las artesanías representan una característica autentica de la cultura salvadoreña, que reviven recuerdos a los hermanos lejanos que durante muchos años han estado fuera del país, y al ver la variedad de regalos se contagian de patriotismo y aquellos momentos de infancia que los marcaron para siempre.
La propietaria señala que cada pieza artesanal cuenta una historia, cada recuerdo tiene un significado y cada producto tiene una utilidad a desempeñar. Con astucia nos muestra los inmortales pitos de barro de Ilobasco, amontonados en un canasto, también los cofres de madera y las azucareras de colores de La Palma.
Y hasta se pueden encontrar en su local artefactos olvidados como las ondillas, los casi extintos "trompocoyotes”, las piedritas de moler de Sensuntepeque y hasta el temido olote para emergencias sanitarias cuando no hay papel higiénico.
Esmeralda Flores explica que otro atractivo que muchas personas buscan en mercado ExCuartel son las artesanías personalizadas, a las que se les graban nombres, mensajes y frases en madera, acrílico, vidrío y porcelana.
Quien entra al "Regalo de Dios” no se va sin llevarse trompos, capiruchos y llaveros, o recuerdos más grandes como hamacas, camisas y calzado, para seguir cerca del terruño que los vio partir y del que juraron nunca olvidarse.