Un día complicado y extraño para Ricardo Montaner en El Salvador
Sábado 28, Octubre 2023 - 12:15 PM
El cantante argentino-venezolano se presentó con casi cuatro horas de retraso este viernes en el Complejo Cuscatlán.
El cantante Ricardo Montaner, de 66 años, dijo haber tenido un día complicado este viernes cuando el avión que lo traería a El Salvador, para su concierto en el Complejo Cuscatlán, presentó desperfectos y generó una espera por otra aeronave, que se extendió toda la tarde y parte de la noche en el aeropuerto de Fort Lauderdale (Florida, Estados Unidos).
"Yo necesito darles una explicación. Está feo... Yo sé que la gente va a pensar que si la organización, que si el empresario... ¡Nada que ver! El empresario (All Stars Promotions, productora del show) se ha comportado como un caballero, la organización ha sido perfecta, todo ha sido maravilloso", aclaró el artista, que subió al escenario con casi cuatro horas de retraso, a las 11:45 de la noche, con el tema "La cima del cielo" y haciendo esfuerzos con una voz ligeramente afectada.
Cabe mencionar que una hora antes de su llegada, el público se encontraba impaciente y había comenzado a hacer abucheos por la demora. Un breve video en las pantallas del escenario mostró al artista en su transporte, donde decía: "Ya les contaré lo que pasó, nos falta un poquito". Algunas personas incluso pedían que los teloneros salvadoreños Opus 503 volvieran a cantar durante la espera, pero en esos momentos, Montaner apareció.
Fue después de varias canciones que el argentino-venezolano relató su fatídica tarde: "A la 1:30 p.m. hora de ustedes, yo estaba paradito frente al vestíbulo del aeropuerto donde está el avión que me traía, desgraciadamente se le estropeó la computadora y ustedes comprenderán que ni de vaina me subía yo a esa cosa. Entonces me dicen: tranquilo, que te conseguimos otro. Yo estaba en Fort Lauderdale (Florida) y el avión venía de Carolina del Norte, no llegaba y no llegó. Probamos con un tercer avión, venía de Nason (Illinois) y gracias a Dios llegó".
"Cuando yo vi que eran las 7:30, 8:00 de la noche y seguía en Fort Lauderdale la comida del avión me la comí ahí, no hallaba qué hacer, llamaba a Marlen: 'mi amor, yo no sé qué voy a hacer'. Y me dice: 'lo mejor que puedea hacer es que cuando llegues ahí, es que te pares frente a esas miles de personas y les digas la verdad... quiero frecerles mis mejores canciones y dejarles mi alma para que se la lleven pa' su casa... ¡Qué viva El Salvador, carajo!", concluyó.