La inflación en El Salvador se desaceleró en agosto por undécimo mes consecutivo al ubicarse en 3.09 % en agosto pasado, según la última actualización del Banco Central de Reserva (BCR).

Frente al mes anterior, la inflación bajó un 0.25 % y su promedio de agosto es el más bajo desde junio de 2021.

¿Significa que los precios están más bajos? No, realmente el valor de los productos y servicios sigue subiendo, pero lo hace a tasas mucho más bajas desde los picos registrados a mediados de 2022, cuando superó la cota del 7 %.

Con los resultados de agosto se cumple la proyección del Banco Central de Reserva (BCR), que este indicador se sitúe entre un 3.5 % y un 4.1 % este 2023. La inflación es una fotografía del costo de la vida, un tema que antes de la pandemia de covid-19 no tenía tanta transcendencia hasta que comenzó a subir por los desórdenes de la cadena logística.

Alimentos en la corona.

Según el BCR, la inflación de alimentos y bebidas no alcohólicas quedó en un 6.11 %, su cota más baja desde octubre de 2021.

El último dato disponible sobre el precio de la canasta básica alimentaria (CBA) corresponde a julio, cuando en la zona urbana se disparó a $255.35, al menos $4.59 más que en junio. En la región rural, en tanto, subió $5 en un solo mes y quedó en $193.98.

La Oficina Nacional de Estadísticas y Censos (Onec) reporta que esta alza fue justificada por un precio más alto en las raciones de tortillas, el arroz, las carnes, las grasas, los frijoles, las frutas y verduras, y la leche fluida.

De las 12 categorías que conforman el Índice de Precios al Consumidor (IPC) -usado para medir la inflación-, el sector de muebles y artículos para el hogar, así como comunicaciones y recreación y cultura registraron deflación (baja de precios).

El Banco Central registra que aumentó la inflación para la categoría de bebidas alcohólicas, pues pasó de un 3.90 % en julio a un 4.48 % en agosto.

La categoría de transporte también subió dos veces, pues se colocó en un 1.59 % en agosto (un 0.69 % en junio).