El Salvador tiene más de 240 años de producir café.


El café salvadoreño sigue siendo uno de los más demandados en el mercado internacional, al punto que más del 79 % de lo producido en el país se exporta.

Los datos del Consejo Salvadoreño del Café (CSC) indican que en el ciclo 2020-2021 los productores exportaron 617,229 quintales de café, esto equivale al 79.2 % de los 778,730 quintales que se sacaron en ese mismo ciclo.

Esto quiere decir que 161,601 quintales se quedaron en la plaza salvadoreña.

Pese a que El Salvador es un productor de café, las importaciones del grano de oro para consumo nacional se mantienen en alza y representan hasta el 32 % de lo producido, destacó la Asociación Cafetalera de El Salvador (Acafesal).

Citando datos del CSC, la gremial señaló que en el ciclo 2019-2020 al territorio nacional ingresaron 385,167 quintales, equivalente al 32 % de los 740,100 quintales producidos en ese ciclo.

“Esto nos demuestra la oportunidad que tenemos de poder procesar nuestro café y que el consumo se haga con café salvadoreño, lo cual daría una buena oportunidad económica para los caficultores”, indicó Omar Flores Hidalgo, presidente de la Acafesal.

El café es una de las bebidas preferidas por los salvadoreños pues al menos el 88 % afirma que lo consume y que incluso lo considera parte de su canasta básica. Según una investigación de mercado del CSC, el 81 % prefiere el café instantáneo y un 39 % dice que toma más de una taza al día.

El sector caficultor es el principal empleador en las zonas rurales con una generación de más de 50,000 puestos de trabajos.

Un café de calidad.


En El Salvador se cultiva café desde 1779, hace 242 años, con las primeras plantaciones en terrenos de campesinos en Ahuachapán. Este rubro se volvió parte clave de la economía nacional y contribuyó al desarrollo de varias infraestructuras, como la construcción del Palacio Nacional en San Salvador a través de una aportación por quintal exportado a inicios de 1900.

En la década de 1970, El Salvador se convirtió en el quinto productor mundial y el cuarto exportador con cosechas cercanas a los cinco millones de quintales. Sin embargo, en 2001 hubo una crisis sin precedentes de caída de precios internacionales, que dejó al sector endeudado, luego en 2013 hubo un ataque de la roya y 2017 comenzó otra ola de bajos precios.

A pesar de la crisis interna, “nuestro café es de alta calidad con una demanda en diferentes países”, destacó el presidente de la Acafesal.

El 79 % de las exportaciones en 2021 fue como café de calidad o diferenciados, y los cuales los compradores suelen pagar más que lo cotizado en la bolsa. El 11.8 % se envió al mercado exterior como comerciales, 8.40 % como inferiores y un 0.40 % elaborados.

El café salvadoreño es demandado principalmente por cinco destinos: Estados Unidos, Alemania, Japón, Bélgica y Reino Unido, quienes en conjunto compraron en 2021 el 77.5 % de todo lo exportado.