En la desaceleración económica que se dio en el año 2008, muchas familias estadounidenses perdieron propiedades y ahorros, a partir de ahí surgió una enorme desconfianza en el sistema financiero, por ello una buena parte de las personas decidieron no guardar dinero en los bancos. En ese contexto Sandra Rogoff, del Estado de California, buscaba en los supermercados las mejores ofertas y en uno de esos días tomo los alimentos que necesitaba y entre ellos compro una caja de galletas saladas, al llegar a su hogar abrió el paquete y encontró un sobre blanco, sin nombre ni dirección.

El sobre contenía $10,000. Sandra quedó impávida al ver tal cantidad de dinero, sin embargo, se lo comunicó a su padre, “Joe” y pronto toda la familia estuvo reunida en torno al sobre del dinero, y se preguntaban cómo el dinero había terminado allí. A pesar de la escasez de dinero que existía por la depresión económica, decidieron llamar a la Policía, para que se entregara el dinero al verdadero propietario. “Pensamos que ese dinero debía ser de alguien que ahora mismo está angustiada por esa perdida y no nos sentiríamos bien si gastamos algo que no es nuestro”, dijo Sandra Rogoff.

Ante la denuncia de la familia Rogoff, los agentes de la policía de esa población que fueron a su casa sugirieron que podría tratarse de dinero depositado en una transacción por drogas. Pero indagando con el gerente de Whole Foods, que era la tienda donde adquirieron las galletas, dijeron a la Policía que pocos días antes una anciana había llegado al supermercado muy agitada y dijo que había devuelto, por error, la caja de galletas en la que estaban los ahorros de su vida. La mujer, cuya identidad no se divulgó, dijo que estaba atemorizada porque el Gobierno federal ha intervenido muchos bancos y había sacado sus ahorros de la cuenta y los había guardado en su casa.

La familia Rogoff, nunca recibió una palabra de agradecimiento de la anciana, ni tampoco les dieron recompensa alguna, señaló el periódico que publicó la noticia.

Dice el Proverbios 10:9 “El que camina en integridad anda confiado; Mas el que pervierte sus caminos será quebrantado” para la imagen del mundo la familia Rogoff, no recibió ninguna gratificación por la integridad con la que actuaron al no quedarse con un dinero que no les había costado ningún esfuerzo o sacrificio, pero delante de Dios han recibido una gran recompensa, ya que lo que el ser humano siembre eso cosecha tarde o temprano.

¿Qué significa eso? Significa que no importa que tan deshonesto o corrupta pueda ser una persona y por más que tarde el juicio divino, llegará tarde o temprano y alcanzará al individuo que ha sembrado el mal. La historia es vasta de cómo han terminado todo aquel que ha desafiado a Dios, con arrogancia y maldad. Tancredo Neves, expresidente de Brasil: Durante la campaña Presidencial, dijo que si conseguía 500,000 votos ni Dios lo quitaría de la Presidencia. Efectivamente él consiguió los votos, pero se enfermó antes de asumir la presidencia y murió.

La gran actriz Marilyn Monroe, fue visitada por al pastor Billy Graham durante una presentación de un show. Él dijo que el Espíritu de Dios le había enviado a predicarle a ella. Después de oír lo que el Predicador tenía que decir, ella dijo: “Yo no necesito a su Jesús”. Una semana después, ella se encontró muerta en su apartamento. Lo mismo ocurrió con Bon Scott, ex-vocalista del AC/DC. En una de sus canciones de 1979, él cantó: No me detenga, yo estoy bajando todo el camino, bajando por la carretera al infierno. A los 19 días de febrero de 1980, Bon Scott se encontró muerto, ahogado por su propio vómito.

No os engañéis; Dios no puede ser burlado: pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará. (Gálatas 6:7). De manera que la integridad es como la vida, es una, no se puede pretender ser honesto en unas cosas y no serlo en otras, y no importa que tal lejos llegues, recuerda que no se puede ir por la vida humillando a los demás, actuando con impunidad, ya que tarde o temprano la maldad alcanzara el deshonesto.