Así respondió el alto funcionario público a la pregunta si habrá un trato preferencial para los salvadoreños derivado del acuerdo para recluir a criminales deportados de Estados Unidos en el Centro de Confinamiento contra el Terrorismo (Cecot) de El Salvador.
“El acuerdo entre Estados Unidos y El Salvador no fue una negociación, no se trató de un intercambio de favores ni de ningún tipo de acuerdo. No existe un trato preferencial con respecto a la inmigración ilegal en Estados Unidos".
Joseph Salazar, subsecretario de Estado adjunto para Hemisferio Occidental de EE.UU.
Salazar dio una conferencia regional y virtual con la subsecretaria de asuntos públicos del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Trici McLaughlin, para promover la autodeportación de extranjeros en los Estados Unidos que se encuentren en situación migratoria irregular.
El funcionario no detalló si esta decisión de no dar "trato preferencial" también aplicará a los compatriotas que mantienen sus permisos de trabajo vigentes gracias a la prórroga del Programa de Estatus Temporal (TPS) aprobada para El Salvador a finales de la administración Biden y que quedó vigente hasta el 9 de septiembre de 2026.
La secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Kristi Noem, visitará El Salvador el miércoles 26 de marzo, se reunirá con el presidente Nayib Bukele y hará un recorrido por el Cecot con el ministro de Justicia y Seguridad, Gustavo Villatoro. Uno de los temas de su visita será precisamente la aplicación CBP Home para notificar las autodeportaciones de los migrantes en situación irregular.
En definitiva, nuestros países socios son socios cruciales en la deportación de estas personas, estos extranjeros delincuentes en nuestro país. También (en la visita a El Salvador, Kristi Noem) hablará sobre la aplicación CBP Home y cómo podemos utilizarla para realizar deportaciones autónomas seguras. Trici McLaughlin, subsecretaria de asuntos públicos del DHS.
El gobierno de EE.UU. ha destinado $200 millones para promover la aplicación CBP Home, que ha sustituido a la aplicación CBP One que antes era utilizada para solicitar asilo en los Estados Unidos, y que ahora servirá para que los migrantes, una vez hayan salido y se encuentren a una distancia de al menos tres millas de los Estados Unidos, confirmen su autodeportación con el envío de sus datos de pasaportes, su ubicación y una fotografía de su rostro.