Un portavoz de USAID confirmó a Diario El Mundo la pausa en todos los programas y subvenciones que realiza en El Salvador, una suspensión anunciada el 26 de enero por el Departamento de Estado de EE.UU.
"En este momento, para poder hacer una revisión exhaustiva, todos los programas y subvenciones sin una exención aprobada por el Secretario de Estado que utilicen fondos de asistencia extranjera están en pausa", informó el portavoz.
El secretario de Estado, Marco Rubio, tomó la decisión de suspender los programas mientras evalúan si los continúan financiando o los cancelan definitivamente.
“Cada dólar que gastamos, cada programa que financiamos y cada política que aplicamos debe justificarse con la respuesta a tres preguntas sencillas: ¿Hace que Estados Unidos sea un país más seguro? ¿Hace que Estados Unidos sea más fuerte? ¿Hace que Estados Unidos sea más próspero?”.
Marco Rubio, secretario de Estado de EEUU.
En El Salvador, esta pausa ha implicado el recorte de personal o su evaluación en algunas organizaciones no gubernamentales.
La Asociación Transparencia, Contraloría Social y Datos Abiertos (Tracoda) no cierra, pero probablemente lo hagan si no logran obtener otras fuentes de financiamiento.
"Probablemente en dos o tres semanas si no levantamos fondos, reducimos el 80-90 % de personal", detalló el presidente de Tracoda, Luis V. Villaherrera.
El director ejecutivo de la organización Acción Ciudadana, Eduardo Escobar, se limitó a responder que aún no han determinado el impacto de esta suspensión como organización.
La primera nota de suspensión de la ayuda fue enviada por USAID a las implementadoras, entidades que canalizan el financiamiento a instituciones beneficiarias de programas o subvenciones. Posteriormente, el 27 de enero, las implementadoras comunicaron a los beneficiarios el paro de actividades relacionadas a los programas o subvenciones.
El 26 de enero, el portavoz del secretario de Estado informó que, en cumplimiento de la "Orden ejecutiva del presidente Trump sobre la reevaluación y el reajuste de la ayuda exterior de los Estados Unidos", Rubio "ha suspendido toda la asistencia exterior estadounidense financiada por o a través del Departamento de Estado y la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) para su revisión".
Ante la pregunta si la ayuda a El Salvador está suspendida efectivamente, un vocero de la Embajada de Estados Unidos en El Salvador dijo que el presidente Trump "está revisando todos los programas de ayuda internacional para asegurar que estén alineados con los valores estadounidenses".
La pausa también ya ha afectado las contrataciones de personal local en la Oficina de Asuntos Internacionales de Narcóticos y Aplicación de la Ley del Departamento de Estado de los Estados Unidos (INL, por sus siglas en inglés) y la Academia Internacional para el Cumplimiento de la Ley (ILEA San Salvador), según fuentes.
Según el Departamento de Estado de Estados Unidos, la pausa se debe a una "revisión de todos los programas de asistencia exterior", ya que aseguran que buscarán que estos "sean eficientes y coherentes con la política exterior estadounidense en el marco de la agenda de Estados Unidos primero", algo que calificaron de "imperativo moral".
"El presidente Trump afirmó claramente que Estados Unidos ya no va a repartir dinero a ciegas sin ningún beneficio para el pueblo estadounidense". Vocero del Departamento de Estado de EE.UU.
El vocero del Departamento de Estado aseveró que Rubio "se enorgullece de proteger la inversión de Estados Unidos con una revisión deliberada y juiciosa de cómo gastamos los dólares de asistencia extranjera en el extranjero".
USAID tiene programas de ayuda a El Salvador desde enero de 1962. Posee programas de seguridad ciudadana, especialmente en colaboración con municipios, organizaciones comunitarias y empresas privadas en la creación de espacios públicos seguros; programas de mayor transparencia, rendición de cuentas y gobernabilidad; y financia también proyectos de ayuda alimentaria, mitigación de riesgos y ayuda a migrantes retornados.
En mayo de 2021, la agencia USAID retiró la ayuda a El Salvador a instituciones salvadoreñas involucradas en la destitución de la Sala de lo Constitucional y del fiscal general en El Salvador del 1 de mayo de ese año, porque consideraron que "las instituciones democráticas, la transparencia del Gobierno y la protección de los derechos humanos son vitales para crear las condiciones para la prosperidad de El Salvador" y les preocupaba "gravemente las acciones de la Asamblea Legislativa el 1 de mayo destituyendo los cinco magistrados de la Sala de lo Constitucional de la CSJ y al fiscal general" dijo en aquella ocasión Mileydi Guilarte, subadministradora adjunta de USAID para América Latina y El Caribe.