La Organización de Mujeres Salvadoreñas por la Paz (Ormusa) informó que 3,693 niñas y adolescentes entre los 10 y 19 años han reportado embarazos entre enero y marzo del 2021.

Sin embargo, los porcentajes de embarazos en menores de 19 años no han presentado una diferencia marcada en los trimestres de los últimos tres años.

“En términos de número llevábamos en el primer trimestre de 2020, 144 de 10 a 14 años, y llevábamos 3,837 de 15 a 19 años; en el periodo enero marzo 2021 habían 138 niñas de 10 a 14 años y 3,555 de 15 a 19 años, de ahí tenemos con respecto al total de embarazo con respecto del 22.45 %”, expuso la miembro del observatorio de derechos sexuales y reproductivos de Ormusa, Vilma Vaquerano.

Para Vaquerano según las leyes del país, todo embarazo entre los 10 y 14 años debería ser investigado y tratado como una violación, y de hecho el Código Penal tipifica el delito de “estupro por prevalimiento” en su artículo 163, como aquel que tiviera relaciones sexuales con una persona, en este caso, entre los 15 y 18 años, prevaliéndose de la “superioridad originada por cualquier relación”, sancionándose con prisión de seis a 12 años.
“La forma de llevar los servicios de salud ya no es la misma, hay una limitante en la movilidad de los usuarios y usuarias, hay un temor de la población de usuarios y usuarias al covid-19”. Mayra Bolaños, Educadora para la Salud

Según la experta si se refleja “un aumento” el país lo notará en los próximos meses, aunque a la fecha ya se tendría que observar “embarazos en segundo semestre”.

Sin embargo, lo más importante para Ormusa es que “la gente no debería naturalizarse el embarazo en niñas adolescentes”.

Para este año la cantidad de niñas embarazadas entre los 10 y 14 años entre enero y marzo refleja 138 reportes, y entre los 15 y 19 años son 3,555, ambos conforman un 22.45 % de todos los embarazos

 

Años atrás.


Las cifras recopiladas por la organización no presentan una “disminución levísima”, como destacó Vaquerano, para el año 2020 los embarazos entre niñas de 10 y 14 años disminuyeron a 144, y entre los 15 y 19 años se reportaron 3,837, representando un total de 3,931 casos que presentaron un 22.8 % de todos los embarazos del país.

Entre enero y marzo del 2019, 149 niñas entre los 10 y 14 años tuvieron un embarazo, y entre los 15 y 19 años fueron 4,042, lo cual representa un 24.74 % de to dos los embarazos de ese año.

Lo que resulta preocupante de estos datos para la miembro de Ormusa es que los casos de niñas embarazadas continuaron registrándose el año pasado a pesar de que se vivía una pandemia e iniciaba una cuarentena en el país, en total se tuvieron 12,781 niñas embarazadas en 2021, un 22.29 % de las gestaciones en el año.
“Tenemos que tomar conciencia de cómo los embarazos son solamente un reflejo de otras problemáticas de violencia que sufren las niñas y adolescentes en el seno de la familia o fuera del seno de la familia”. Vilma Vaquerano, Observatorio de derechos sexuales y reproductivos de Ormusa

Además según Vaquerano el hecho de que la familia se encontrara en casa significaba y esperaban que los embarazos fueran aún menores, sobre todo en niñas entre los 10 y 14 años, pero la diferencia con el año 2019 en este grupo solo fue de 62.

“También se suponía que el grupo familiar estaba ahí, de alguna forma debería significar que esperaremos menor número de embarazos, sobre todo en ese grupo de 10 a 14 años”, indicó Vaquerano.

San Salvador fue el municipio que más embarazos registró en el 2020 con 1,902 reportes, seguido de Sonsonate con 1,447, y 1,383 del departamento de La Libertad.

 

En voz del experto



  • Más muertes maternas


Según un informe de Ormusa, en el 2020 también se registraron más muertes maternas que en los últimos cinco años, con 46 decesos; de estos, cuatro eran niñas entre los 12 y 18 años, y el resto rondó entre los 19 y 50 años. La educadora para la Salud, Mayra Bolaños, indicó que aunque muchas enfermedades han disminuido en comparación del 2020 y el 2019, como el caso del cáncer de mama o el cáncer de cérvix, la influencia a la disminución apunta a que las consultas médicas en la red hospitalaria disminuyeron también, y que aunque autoridades sanitarias aseguran que las atenciones no se restringieron, las dificultades de movilización por la cuarentena, la suspensión del transporte y el miedo por el covid-19 “forzó” a pacientes a no buscar atención médica.