Antes de lesionarse la rodilla dos veces y ser dado por “muerto” futbolísticamente hablando no existía un mejor delantero que Ronaldo Luís Nazário de Lima, conocido deportivamente como Ronaldo. Pero después de la lesión demostró que tenía la capacidad física y mental para sobreponerse al momento más complicado de su carrera y lograr lo que no había hecho antes en 1998, ser la figura del Brasil campeón del mundo y seguirse manteniendo como uno de los mejores arietes del futbol europeo.



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“Ya no aguanto los dolores”, sostuvo Ronaldo casi al borde del llanto. “Esos dolores han hecho adelantar el final de mi carrera”, dijo el ‘Fenómeno’ a la hora del adiós. La cruda imagen de sus rodillas muestran las poderosas razones que lo obligaron a parar.

Al ver las extensas costuras, parecen las rodillas ‘Frankenstein’. Al inicio de la temporada 99/2000, cuando jugaba por el Inter de Milán, se rompió el tendón rotuliano de la rodilla derecha y estuvo un año fuera de las canchas. En su retorno, en la temporada 2000/2001, se volvió a lesionar de la misma rodilla en el primer partido tras una entrada de Fernando Couto. La reconstrucción de la rodilla derecha lo obligó a un año más de para.

Ocho años después, el 13 de febrero del 2008, cuando jugaba por el Milan se rompió el tendón rotuliano de su rodilla buena: la izquierda. La grave lesión lo dejaría 9 meses fuera las canchas, pero fichó por el Corinthians en diciembre del mismo año.