“Vemos que la inflación que estamos viviendo ahora va a tener efectos profundos en los mercados laborales”, indicó el director subregional.
Beteta explicó que la inflación (alza generalizada de precios) afecta la estructura de los costos de las empresas, por lo que la generación de empleos se volverá más lenta en algunos sectores.
Esto traerá consigo una mayor exigencia por parte del patrono al empleado. Recordó también que la inflación impacta en el ingreso real de los trabajadores.
El vocero de la Cepal indicó que la inflación ha afectado principalmente los alimentos, los combustibles y el transporte.
La Secretaría Ejecutiva del Consejo Monetario Centroamericano (Secmca) coloca a El Salvador como la segunda economía con la inflación más baja en la región, con 7.66 %, solo por encima de Panamá con un 3.51 % .
Sin embargo, en El Salvador, el precio de la canasta básica alimentaria siguió su tendencia al alza en julio y llegó a $238.71, impactada por la inflación que continuó colocando con altos precios de mercado los alimentos y bebidas no alcohólicas, en ese mismo mes.
Ante una crisis que parece no frenar, y para amortiguar el deterioro del poder adquisitivo de los hogares, Beteta indicó que es importante ejecutar políticas fiscales para cerrar la brechas de evasión de impuestos, así como revisar los privilegios fiscales, y evaluar el gasto público, con el fin de incrementar la inversión pública que se complemente con proyectos privados.