Primero, ingresó la Asamblea Legislativa, cuyo entonces presidente, Norman Quijano, inició la sesión plenaria y cuyo vicepresidente, Mario Marroquín, verificó el cuórum legislativo: había 83 diputados presentes. El diputado Schafik Hándal, del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), no asistió.
Después ingresaron, los magistrados de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), las delegaciones internacionales; y el presidente y vicepresidente electos Nayib Bukele y Félix Ulloa, luego de lo cual el arzobispo de San Salvador, monseñor José Luis Escobar Alas, pronunció algunas palabras.
Quijano le hizo la protesta constitucional y Bukele le respondió: “Sí, protesto”. “Protestais bajo vuesta palabra de honor ser fiel a la República, cumplir y hacer cumplir la Constitución, ateniéndose a su texto cualesquiera que fueren las leyes, decretos, órdenes o resolucions que las contraríen”, había leído Quijano. “Quedais en posesión del cargo de presidente constitucional de la República de El Salvador”, agregó.
Luego, Bukele le dio la mano a Quijano, luego de la indicación de su encargado de protocolo, Francisco Merino. Posteriormente, se acercó el presidente saliente Salvador Sánchez Cerén, a quien le retiraron la banda presidencial. Luego se le entregó una nueva banda presidencial para que Quijano se la impusiera a Bukele, quien dio un discurso ante sus seguidores, ubicados en la Plaza Cívica o plaza Gerardo Barrios.