El Tribunal Quinto de Sentencia, de San Salvador, condenó a Héctor de Jesús Castaneda a 14 años de prisión y a pagar $1,200 en concepto de responsabilidad civil, tras ser encontrado culpable del delito de cómplice no necesario en homicidio simple en perjuicio de dos activistas del FMLN y de intento de homicidio en perjuicio de otras dos personas que regresaban de un mitín del partido político, la tarde del 31 de enero de 2021.

Castaneda era motorista del Ministerio de Salud y ese día se conducía en un vehículo Kía Azul, junto al exagente de Protección a Personalidades Importantes (PPI) de la Policía Nacional Civil, Diego Francisco Alvarado Peña, y de Roberto Carlos Coto de Paz, otro exvigilante de seguridad privada.



Este último fue absuelto de responsabilidad penal y civil, quien fue procesado por los mismos delitos.

Argumentos

El juez fundamentó su fallo en las declaraciones de las tres víctimas que sirvieron como testigos en el juicio: con claves “Córcel”, “31” y “Enero”; sin embargo, afirmó que “Enero” fue el testigo que más detalles de los hechos ofreció en el juicio para establecer la participación de Castaneda.

Los hechos ocurrieron entre la 1ª. Calle Poniente y 11ª. Avenida Norte en San Salvador, y fueron grabados por las cámaras de seguridad de los negocios y del sistema Arguz, de la PNC.

“Enero” manifestó que Castaneda se dirigió al conductor del pick up blanco, donde viajaban las víctimas, y con arma en mano disparó dos veces al suelo y luego encañonó al conductor, quien con manos arriba, le decía: “Calmado, tranquilo”.

Mientras que el entonces agente PPI, Diego Francisco Alvarado Peña, disparaba contra las víctimas; dejando como saldo dos muertos, identificados como Gloria Rogel del Cid y Juan de Dios Tejada. También resultaron lesionadas las víctimas con clave “Corcel” y “31”.

En el caso del exvigilante, Coto De Paz, el juez manifestó que no fue vinculado por los testigos ni fue visto en la escena en los vídeos a la hora de los hechos, tampoco los testigos refieren que portaba arma de fuego y que la haya disparado. De hecho, en los videos que mostró Fiscalía, este se aparta y se va por el lado de la acera.

El juez manifestó que si Diego Francisco Alvarado Peña estuviera con vida, le hubiera puesto una condena de 22 años de prisión tomando en cuenta que él fue el actor material de aquel ataque; 18 años por los dos homicidios simples y 4 años más por intento de homicidio simple contra otras dos personas que resultaron lesionadas en el ataque.