El incendio en el botadero a cielo abierto de la comunidad Santa Eduviges, en Ilopango, no ha podido ser apagado por el Cuerpo de Bomberos de El Salvador, debido a una gran cantidad de desperdicios de tela que se combinan con plástico y cartón al quemarse, según indicó el jefe de la delegación de bomberos de Soyapango, Rodolfo Quintanilla.
“¿Qué pasa con la tela al quemarse? Forma una capa que no permite que el agua penetre, cuando se lanza agua, desliza”, explicó ayer Quintanilla, mientras seguían controlando el siniestro.
Bomberos cumplió ayer cuatro días de estar atendiendo esta emergencia en el botadero. Quintanilla explicó que la forma más efectiva de apagarlo es removiendo la basura, sin embargo, la forma del terreno en pendiente impide que puedan descender.
Supuestamente, el domingo había un incendio cerca y se propagó al basurero. “El problema es que hay empresas que han depositado desechos de tela”, aseveró Quintanilla.
El pasado domingo y lunes, la Fuerza Aéra apoyó a Bomberos lanzando agua con un helicóptero con sistema bambi bucket; sin embargo, ayer solo una cisterna de bomberos estaba en el lugar.
Quintanilla dijo que esperan la presencia de personal del Ministerio de Obras Públicas que lanzarán tierra al fuego para tratar de erradicarlo.
“Hay fuego interno, nosotros apagamos la llama pero queda el calor abajo, entonces vuelve a incendiarse”, explicó.
Agregó que cada hora, Bomberos está invirtiendo alrededor de $400 en insumos para atender la emergencia.
Los vecinos confirmaron que el lugar es utilizado como botadero desde hace tiempo y el Ministerio de Medio Ambiente verificará por qué la alcaldía ha permitido mantener el basurero.