Según se sabe, el origen del libro proviene de Aurelio Baldor, un matemático de origen cubano. Pero en la portada de éste quien figuraba era el matemático persa conocido como Al Juarismi. Fue la editora del libro la que decidió darle un giro por completo, un cambio que no a muchos les ha caído en gracia.
Estas han sido las divertidas reacciones.