"Sin duda, es una triste noticia para su familia, para todo el personal de Telecorporación Salvadoreña (TCS), empresa que fundó hace 6 décadas, y también para El Salvador, el país que tanto amó. Ha muerto un patriota, comprometido con el desarrollo de la nación, un hombre visionario, el indiscutido padre de la televisión en El Salvador", informó TCS, a través de un comunicado.
Eserski nació en Sonsonate el 22 de mayo de 1928, hijo de don Carlos Eserski y doña Graciela Gómez. Hombre de familia, esposo, padre, abuelo y bisabuelo. Se casó a los 26 años con doña Ana María Álvarez, con quien forjó una sólida familia y procrearon siete hijos, seis mujeres: Graciela, Katia, Ana María, Tatiana, Liuba y Sonia. Y el varón, Juan Carlos.
Inició su carrera en el mundo de las comunicaciones en 1950 cuando participa en la fundación de la emisora radial la YSEB, "La Voz de Latinoamérica", en la que destaca con la radio novela cubana “El derecho de nacer” de Félix B. Caignet.
En 1956 que participa en la fundación del primer canal de televisión de El Salvador, el Canal 6, YSLA-TV. Sus socios recuerdan que fue difícil el inicio de la industria televisiva porque no había aparatos de televisión en el país y tuvieron que empezar a importarlos.
En 1961, Eserski también fundo, junto a Raúl Trabanino e Isidoro Nieto, la popular y novedosa emisora de radio El Circuito YSR.
El 30 de noviembre de 1965, don Boris funda el Canal 2, que dio la pauta para darle el impulso definitivo a la era de la televisión en El Salvador. El acto de inauguración estuvo a cargo del entonces presidente de la República, coronel Julio Rivera. Un año después lanza operaciones el canal 4 de televisión. A fines de los años 70 invierte en el nuevo Canal 6.
En noviembre de 1985, Eserski decide unir a los canales 2, 4 y 6 en un solo consorcio para facilitar su administración, que sería la Telecorporación Salvadoreña, la cadena televisiva más importante del país. En 2003, TCS lanza el canal VTV, hoy conocido como TCS+.
Impulsor de causas nobles
Agudo analista, con un gran sentido del humor, presto siempre a enseñar, perseverante. Afectuoso y atento con sus empleados y colaboradores. Así lo recuerdan sus amigos y conocidos.
Fue un arduo defensor de las libertad de expresión y de la autorregulación de los medios. También fue un influyente personaje en la vida política del país. Como dirigente gremial, contribuyó a la fundación de la Asociación Salvadoreña de Radiodifusores, ASDER; la Asociación de Medios Publicitarios, AMPS.
Fue un impulsor de causas nobles, apoyando organizaciones como la Fundación Teletón Pro Rehabilitación, FUNTER. Además de las campañas Juguetes por Sonrisas, entre muchas otras acciones solidarias, cuando una emergencia del país lo amerita.
Eserski recibió múltiples homenajes a lo largo de sus más de 70 años en el mundo de las comunicaciones. La Asociación Internacional de Radiodifusores, AIR, que lo designó como presidente honorario. En 2019 don Boris Eserski recibió el Doctorado Honoris Causa de la Universidad Alberto Masferrer (USAM).
Su hijo Juan Carlos Eserski lo relevó en la presidencia de TCS en 2012.