Los datos consultados a las familias salvadoreñas servirán para que el Estado y demás actores sociales, como académicos, organizaciones, cooperantes, entre otros, tengan certeza de las condiciones de vida de las familias salvadoreñas, información que según el BCR "servirá de insumo para la toma decisiones de políticas públicas de desarrollo económico y bienestar social, vivienda, salud".
Con este censo ser podrán tener los datos actualizados sobre:
- Permitirá conocer la cantidad de habitantes por distrito, municipio y departamento.
- Se conocerán con certeza cifras sobre mortalidad, de nacimientos y de emigración, tres datos útiles para definir exactamente cuál es la proyección de población en años futuros. Para eso se le pregunta a los ciudadanos si durante los últimos 12 meses ha fallecido alguna persona miembro del hogar y sí algún miembro del hogar se fue a vivir a otro país.
- Permitirá conocer cuántos salvadoreños hay por edad, sexo y estado familiar.
- Cuántas personas trabajan en El Salvador y qué ocupaciones tienen.
- El censo permite tener certeza del grado de escolaridad de los salvadoreños y en qué lugares están quienes requieren de ser tomados como prioridad en políticas educativas.
- También permitirá al Estado conocer cuántos salvadoreños tienen en realidad acceso a tecnología, teléfono e internet, y cómo están clasificados.
- Cuántas personas con discapacidad hay en el país.
- La cantidad de población que habita una vivienda digna, ya que se consulta los materiales de la vivienda, si es propia o alquilada, así como si cumple ciertas condiciones sanitarias como acceso al agua, energía eléctrica, recolección de desechos sólidos y aguas residuales.
- Cuántos hogares viven en hacinamiento, ya que se pregunta cuántos dormitorios tiene cada vivienda y la cantidad de miembros del hogar.
- Otros elementos permitirán analizar la calidad de vida de los salvadoreños como la disposición de bienes electrodomésticos.
- Así mismo se podrá conocer la cantidad de población indígena y afrodescendiente.