Desde la inquietante presencia pumas, cotuzas, gatos salvajes, mapaches, pezotes, gatos zontos, los animales que muchos salvadoreños creíamos que ya no existen, reaparecen con la rehabilitación de áreas forestales.
Cada una de las especies salvajes cumplen un aporte en el ciclo natural de la vida silvestre salvadoreña, y por eso no solo es bueno maravillarse y apreciarlos, los expertos del Marn insisten en no cazarlos, herirlos o atacarlos, tampoco en considerarlos para cautiverio.