"Cinco más, cinco más", gritaban decenas de sus simpatizantes en medio de una bullicio de pirotecnia y el dispositivo de seguridad.
Junto a su esposa, la primera dama, Gabriela de Bukele el mandatario con licencia de su cargo, depositó las papeles de presidente y diputados mientras era rodeado de decenas de periodistas y generadores de contenido.
"Gabriela y yo ya votamos. ¡Vamos todos a votar! Recuerden que si llegan antes de las 5:00pm, los tienen que dejar votar, aunque todavía estén en la cola", publicó Bukele en su cuenta en la red social X.
Bukele, expublicista de 42 años y quien goza de una abrumadora popularidad del 90%, no tiene adversarios de peso que amenacen su segundo mandato.
Unos 6,2 millones de salvadoreños (740.000 en el exterior), estaban llamados a votar en una elecciones vigiladas por miles de militares y policías, y por primera vez bajo estado de excepción desde que acabó la guerra civil en 1992.
"Gabriela y yo ya votamos. ¡Vamos todos a votar! Recuerden que si llegan antes de las 5:00pm, los tienen que dejar votar, aunque todavía estén en la cola", ha publicado Bukele en su cuenta en la red social X