Hoy realiazarán misa y procesión. / Jahir Martínez
Ana Gloria Aguilar tiene 60 años de edad y 40 de esos años, de asistir a todas las festividades de la Parroquia de Los Santos Niños Inocentes, ubicada en Antiguo Cuscatlán. Llevaba cargando junto a su nieta tres niños de barro, vestido de blanco y con flores. Confía en que cuando se pide con el corazón, los milagros se cumplen."Le quitan la enfermedad que usted tiene y que ningún doctor puede, ellos sí interceden por nosotros. A mí por ejemplo, una leucemia que da cáncer me ayudaron a quitarmela”, dijo Aguilar.Este año, llegó a la procesión para presentar a dos niños a quienes les llamó "Lo Gemelos”. Al parecer su nuera está embarazada de dos niños, pero en los exámenes que le han practicado los médicos, los niños no pueden verse. Ella dejará a Los Gemelos en la parroquia pues esta convencida que así como le ayudaron a ella, sus nietos aún no nacidos encontraran las forma de enfrentar todos los problemas en el vientre de su madre.Cada 27 y 28 de diciembre, la parroquia de Antiguo Cuscatlán se viste de colores y junto a toda su feligresía conmemoran el pasaje bíblico que narra la historia de cuando el rey Herodes mandó a matar a todos los niños menores de dos años, con el objetivo de asesinar al niñito Jesús, quién según los tres reyes magos sería el rey de los judíos.Las familias llegan al templo para dejar niños de barro, en canastas y con vestiduras blancas, para que estos sean bendecidos durante la misa oficial del día de los Santos Inocentes. Todos llevan un nombre, algunos de niños que murieron al nacer, otros son ofrendas en agradecimiento y peticiones de milagros como el de Ana Gloria.Desde Sonsonate, también llegó Carlos Hernández quién reunía a varios niños en una sola ofrenda y que pedía la protección de los menores de Sonsonate y la no violencia contra los niños del país.