El abogado defensor, Miguel Flores Durel y la exprimera dama, Ana Ligia de Saca. / Gabriel Aquino
La exprimera dama de la República, Ana Ligia de Saca, y el auditor de Grupo Radial Samix, Milton Romero Avilés Cruz se desvincularon del delito de lavado que les imputa la Fiscalía General de la República (FGR), argumentando no haber participado en los hechos y no tener conocimiento de las irregularidades de las sociedades.Según el defensor, Miguel Flores Durel, las declaraciones de Ana Ligia de Saca sirvieron para ratificar el testimonio del expresidente Antonio Saca, que la desvincula del delito de lavado de dinero, así como la ausencia de dolo."Ratificó la confesión que sirvió de base para la condena de su esposo, en el sentido que ella desconocía todo el entramado que se había construído por parte de Elías Antonio Saca al interior de Grupo Samix (…) ella jamás formó parte de ninguna reunión, nunca estuvo en algún momento de planificación, conspiración, jamás su esposo le compartió eso”, explicó Flores Durel.Añadió que la fiscalía hasta la fecha no ha demostrado la participación objetiva y verificable en los hechos.
Sin afectación.
Para la FGR, las declaraciones de los imputados no afectarán las hipótesis fiscal, ya que consideran que existe evidencia pericial y documental que determina la participación en los delitos."Se establecen de acuerdo a la investigación una serie de transacciones financieras utilizando las sociedades de Grupo Radial Samix, todas esas actuaciones fueron con pleno conocimiento y voluntad de todo lo que estaba pasando (…) ella era la otra persona, que aparte de ser accionista también tenía firmas autorizadas en todas las cuentas bancarias”, puntualizó el fiscal del caso.La pericia financiera contable presentada por la FGR estableció que el auditor contable de Grupo Samix mentía en los informes que eran enviados al Ministerio de Hacienda, por lo cual existe prueba de sus obligaciones dentro del modo de operar para el lavado de dinero, según la parte acusadora."En el caso de Milton Avilés Cruz era el encargado de hacer las auditorias y firmar los dictámenes fiscales que se presentaban al Ministerio de Hacienda (…) se establecieron una serie de obligaciones que él tenia en sus calidad de auditor para verificar como se estaba maquillando la contabilidad de Samix. Tiene una intervención decisiva en el cometimiento del delito de lavado de dinero ”, explicó el fiscal del caso.