Así explican los diputados el nepotismo en la Asamblea

El presidente legislativo y diputado del PCN, Mario Ponce, reconoció que desde noviembre de 2019 tiene conocimiento de que su fracción contrató a la exdiputada Cristina López, residente en Estados Unidos, como asesora del legislativo con un salario de $2,000 mensuales.Ponce dice que "detectó esta anomalía y solicitó a la instancia correspondiente que se busque la forma que esa persona retorne el dinero porque ese es un fraude al Estado” pero lo constató hasta que se hizo pública una investigación periodística de El Diario de Hoy.Norman Quijano, de Arena, aseguró por su parte, que "denunció la existencia de una plaza fantasma” a nombre de López; sin embargo, no cesó su contrato. "Yo no puedo tener control de todos los grupos parlamentarios, son ellos los que deciden a quién van a contratar”, dijo.El expresidente legislativo, sin embargo, desconocía que la hija del fundador del partido y empleada del Coena, Silvia d’Aubuisson, tuviera un puesto como asesora de su fracción, a pesar de no presentarse al recinto legislativo. "Hay que entender que la labor del diputado no se circunscribe en la Asamblea Legislativa, la comparte entre la institución y el territorio”, añadió.Schafik Hándal, del FMLN, defendió la contratación de los exdiputados Misael Mejía, Lorena Peña, Roger Blandino Nerio y Benito Lara como asesores porque "tienen qué aportar”.Rodolfo Parker, en tanto, se "jacta de no tener ningún asesor”, pero defendió la contratación de dos socios del diputado de su fracción, Reynaldo Carballo, como asesores de la Comisión de Educación y Cultura de la Asamblea, por salarios de más de $2,000, porque "son personas idóneas”.Ante señalamientos en contra del diputado de Gana, Guillermo Gallegos, por la contratación de 10 parientes; su jefe de fracción, Guadalupe Vásquez, dijo que "deberá enfrentar las instancias correspondientes” y dijo es necesario garantizar la idoneidad de los contratados.