Un aula de la escuela de Dapchi donde los islamista de Boko Haram secuestraron a 110 alumnas, en una fotografía tomada el pasado 28 de febrero al norte de Nigeria. AFP
Un centenar de estudiantes secuestradas el 19 de febrero por militantes islamistas de Boko Haram en Dapchi, en el norte de Nigeria, fueron liberadas y devueltas este miércoles a sus escuelas por sus raptores.Según las autoridades nigerianas, 101 menores, fueron devueltas por miembros de Boko Haram. "El proceso de recuento está en curso", explicó el ministro de Información, Lai Mohamed.Las adolescentes fueron "dejadas en la carretera, de donde volvieron a sus hogares" dijo el ministro.Este caso es similar al secuestro de Chibok, en abril de 2014, donde más de 200 estudiantes nigerianas fueron secuestradas generando una gran conmoción a nivel planetario.Un centenar de ellas pudieron escaparse o fueron liberadas al término de negociaciones con el gobierno nigeriano.
- Tres días a bordo -"Nos guardaban en una habitación, y nos aportaban ingrediente para que pudiéramos cocinar", relata a la AFP Fatima Gremah, de 13 años, una de las secuestradas en febrero pasado."El sábado nos dijeron que subiéramos a unos barcos. Pasamos tres días a bordo, y luego nos metieron en unos vehículos y nos dijeron que volvíamos a casa", explicó la joven.Según fuentes consultadas por la AFP antes de su liberación, las cautivas fueron retenidas en islas del lago Chad, zona controlada por Boko Haram, movimiento islamista afiliado desde 2015 al grupo Estado Islámico (EI).Presuntos miembros de Boko Haram, atacaron el 19 de febrero un internado de la escuela para muchachas de Dapchi, y se fueron con 110 de ellas, de unas edades de entre 10 y 18 añosEste secuestro masivo fue calificado de "desastre nacional" por el presidente del país, Muhammadu Buhari."Los esfuerzos del presidente Muhamadu Buhari, apoyado por los servicios de seguridad, para traer a las muchachas secuestradas en Dapchi han surtido efecto", según un comunicado del ministerio de Información.Buhari había declarado la semana pasada que el gobierno prefería la solución de una negociación con los insurgentes a una operación militar."La violencia y el enfrentamiento no habrían sido la solución ya que pudo haber puesto en peligro la vida de las cautivas" indicó el ministro Lai Mohamed. Agregó que las negociaciones habían sido facilitadas por "países amigos" y que su liberación fue "incondicional".En su cuenta Twitter, la presidencia nigeriana subrayó que "no se pagó ningún rescate".Aunque el ejército y las autoridades nigerianas no dejan de repetir que Boko Haram está "tecnicamente derrotado", este trágico episodio revela las grandes carencias de seguridad existentes en el noreste del país.El grupo islamista ya no controla grandes partes del territorio nigeriano, tal como ocurrió entre 2014 y 2015, pero sigue llevando a cabo sangrientos ataques contra los civiles y las fuerzas de seguridad.El conflicto en el noreste nigeriano ha dejado más de 20.000 muertos desde 2009 y 1,6 millones de personas siguen sin poder retornar a sus hogares.