Restos de obsidiana se encontraron en los análisis de años pasados, en el agua del lago. / Cortesía LABTOX-UES
El laboratorio de Toxinas Marinas de la Universidad de El Salvador también ha retomado análisis por el cambio de color del lago de Coatepeque, en Santa Ana y señalan que el fenómeno puede darse por causas geológicas y biológicas del espejo de agua.Un comunicado del Laboratorio de Toxinas (LabTox-UES) señala que en los años anteriores los resultados de análisis registraron micro algas tóxicas que alertaron a la población, pero la aparición anual del fenómeno los ha llevado a buscar nuevas hipótesis."Actualmente, el laboratorio ha determinado que el cambio de coloración no se debe a proliferaciones de micro algas”, señala LabTox-UES en su comunicado.La semana pasada, el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) prohibió la emisión de permisos para construir en los alrededores del lago de Ilopango, porque, según la titular, Lina Pohl, no se ha cumplido con un esquema para evitar la contaminación del agua.Según la cartera de Estado, es la contaminación de los alrededores la que provoca que el color del lago de Coatepeque cambie a turquesa en los últimos cuatro años.La semana pasada, el MARN también tomó muestras del agua del lago.Por su parte, la Fundación Coatepeque ha señalado no estar de acuerdo con esta afirmación del Ministerio de Medio Ambiente, debido a que los análisis que han enviado a universidades de Estados Unidos han revelado la presencia de sustancias como la obsidiana, un tipo de roca volcánica que se forma en el enfriamiento rápido de la lava.Fundación Coatepeque ha tomado la iniciativa de colocar biobardas para evitar que desechos sólidos que bajan con aguas recibidas, lleguen al espejo de agua y terminen contaminándolo.El lago de Coatepeque es el resultado de una erupción volcánica de hace miles de años. Sus alrededores son habitados por familias que se dedican al turismo, la pesca y algunas a la agricultura.