La Corte Suprema de Estados Unidos decidirá si el TPS es equivalente a una "admisión" de parte del gobierno de EE.UU. /Foto: AFP.
La Corte Suprema de los Estados Unidos iniciará este lunes una audiencia histórica de inmigración que
podría cambiar drásticamente la suerte de casi 250,000 salvadoreños que viven en Estados Unidos bajo el Estatus de Protección Temporal (TPS, por su sigla en inglés), y ahora buscan una residencia permanente en ese país.
Este 19 de abril está programado que los jueces escuchen los argumentos orales en el caso Sánchez versus Mayorkas, que se centrará en dirimir si los migrantes con TPS son elegibles para convertirse en residentes legales, en el caso que que hayan ingresado a Estados Unidos sin la autorización de un oficial migratorio.El TPS, que beneficia a más de 411,326 inmigrantes ─
de los cuales 247,697 son salvadoreños─, es una categoría migratoria que otorgó el Departamento de Seguridad Nacional en respuesta a las crisis humanitarias que han vivido El Salvador, Honduras, Nicaragua, Haití y otros países que enfrentaron guerras civiles, epidemias y desastres naturales.
La Corte escuchará hoy los alegatos de José Santos Sánchez y Sonia González, una pareja de casados originaria de El Salvador que tiene cuatro hijos. El menor de ellos es un ciudadano estadounidense.Sánchez y González huyeron de El Salvador en 2001, pero en ese momento no fueron inspeccionados ni admitidos a Estados Unidos; es decir, no recibieron autorización de un oficial de migración para ingresar a territorio estadounidense; pero sí recibieron TPS por la crisis que atravesaba el país, en medio de los terremotos.En 2007, Sánchez logró ser elegible para una visa de trabajo, y aunque aplicó para una "green card" o residencia permanente para él y su esposa,
le fue negada por el tribunal del tercer circuito, debido a que nunca fueron "inspeccionados y admitidos" al llegar a Estados Unidos. Inspección: ¿por qué es obligatoria?
Los abogados de Sánchez y González demandan que la Corte Suprema resuelva sobre la forma en que las cortes del circuito federal emiten resoluciones para cientos de migrantes en la misma situación, y
obligan a los tepesianos a dejar el país y volver a entrar para poder ser "inspeccionados y admitidos" por un oficial de migración. En los últimos años, las cortes del circuito han estado divividas sobre si quienes entraron ilegalmente a Estados Unidos y ahora gozan de TPS, pueden aplicar a una green card sin salir de Estados Unidos y luego regresar.Según los representantes legales, la intención del Congreso al crear el TPS fue para proveer un "puerto seguro" para los individuos cuyos países de origen atraviesan crisis humanitarias.
Por ello, obligarlos a regresar a sus territorios solo para reingresar a Estados Unidos y recibir la "inspección legal"; "frustra el motivo inicial por el que se creó el estatus".Los expertos migratorios creen que el punto clave es si otorgar el TPS constituye una "admisión" a Estados Unidos, para el propósito de adquirir otro estado (como la ciudadanía),
lo que permitiría ajustar el estatus de miles de personas. Según el tribunal del tercer circuito ─que negó la ciudadanía a Sánchez y González─, "el TPS no puede ser una admisión porque requiere que un extranjero esté presente en Estados Unidos para ser elegible", por lo que "no es un programa de entrada".