Cristiani responde a acusación por la masacre jesuita: “Jamás hubiera autorizado que le hicieran daño al padre Ellacuría"

A través de una carta, el expresidente de la República, Alfredo Cristiani, aseguró que "jamás” hubiera autorizado el asesinato del padre jesuita Ignacio Ellacuría y al resto de sacerdotes, además, afirma que nunca fue informado ni le pidieron autorización para el operativo. El exmandatario afirma que compartió con el padre Ellacuría "el objetivo de lograr la paz, a través del diálogo político” y que desde previo a su toma de posesión sostuvo una relación, que califica "de mutuo respeto”. "Constaté que él estaba haciendo todo lo posible para abrirle el caminio al diálogo”, dice su misiva. La Fiscalía General de la República acusó a Cristiani del delito de comisió por omisión en el delito de asesinato y el requerimiento afirma que fue informado de la decisión de asesinar al padre Ellacuría y que "no dio una contraorden”. En su declaración, el expresidente dice a la opinión pública que siempre ha estado dispuesto a someterse a la justicia "pero no a un proceso judicial manipulado y sin garantías de independencia e imparcialidad”. El exgobernante afirma que el fiscal general "impuesto” "ha pasado de la difamación y el acoso político mediático a una persecuciónjudicial viciada de irregularidades”. Añade que no hay garantías procesales en el país y que los jueces y fiscales son "impuestos y completamente serviles al poder presidencial”. La misiva del exmandatario fue publicada en la cuenta de Twitter, de su hija, Claudia Cristiani, quien hace unas tres semanas publicó en su cuenta de Facebook, una fotografía de su padre en la que sugiere que han retornado a Italia. El expresidente es hijo de un inmigrante italiano. El pasado 1 de marzo, el fiscal general, Rodolfo Delgado, aseguró que la salida de Cristiani era "inminente”. "Es normal y es algo común que la gente salga huyendo ante una inminente acusación. Hay que decir, este no ha sido un proceso que se ha desarrollado en el sigilo que requiere una investigación, al contrario, han sido eventos que se han dieron hace 32 años, y se han expuesto en diferentes momentos ante la opinión pública. Esto simplemente era algo inminente", dijo en una entrevista de la televisora gubernamental. Durante el juicio contra el excoronel Inocente Montano, en España, en 2020, el exteniente Yusshy Mendoza -testigo de la acusación- dijo a la Audiencia Nacional Española que "si no hubo contra orden es que el presidente lo tuvo que haber aprobado”. Ahí, el excoronel Montano fue condenado a 133 años de cárcel por la matanza de los sacerdotes españoles Ignacio Ellacuría, Ignacio Martín Baró, Segundo Montes, Amando López Quintana y Juan Ramón Moreno, asesinados el 16 de noviembre de 1989 por el batallón Atlacatl de la Fuerza Armada salvadoreña en el campus de la Universidad Centroamericana. Junto a ellos también fueron asesinados el sacerdote salvadoreño Joaquín López, la empleada de los sacerdotes, Elba Ramos y su hija de 16 años, Celina Ramos.