Orlando Tadeo Hernández es un productor de Nahuizalco que espera seguir cultivando hortalizas en el negocio familiar. / G.A.
Para Orlando Tadeo Hernández solo hay una opción: seguir adelante y experimentar. Así logró crecer su negocio familiar en Nahuizalco, en Sonsonate, que inició con pequeños cultivos de piña, pero ahora es uno de los proveedores de hortalizas de la cadena de supermercados Walmart.Originario de Nahuizalco, la tierra de "cuatro Izalcos”, el productor de más de 40 años siguió la tradición familiar de dedicarse a la agricultura desde que era adolescente. En 2008, fue parte de la misión de Taiwán para cultivar especies experimentales en hortalizas y frutas resistentes al cambio climático, lo cual le permitió tener sus primeros acercamientos con la cadena del supermercado.En ese momento, recuerda el productor, tenía cultivos de piña Golden en una manzana de terreno. "Pero la dejamos a un lado” y comenzó a experimentar con el cilantro, perejil, rábano, surtimonte, hierbabuena, alcapate, escarola amarilla, berenjena, güisquil, cebollín, cebollita, chipilín, mora y limón.La mayoría de estos cultivos aún los mantiene y actualmente también experimenta cultivar camote rojo de una nueva variedad que lanzó el Centro Nacional de Tecnología Agropecuaria y Forestal "Enrique Álvarez Córdova” (CENTA)."Con el esfuerzo y todo, hay voy adelante”, asegura el productor.
Trabajadores revisan los cultivos de hortalizas frente al volcán de Izalco. / G.A.
Crecimiento sostenible.
Tadeo Hernández es parte del programa Tierra Fértil que la cadena de supermercados inició hace 18 años para acompañar a los proveedores agrícolas desde el inicio de la siembra hasta que entregan. Abarca también asistencia técnica en caso de plagas o daños por variaciones climáticas.El productor inició haciendo despachos solo lunes con no más de 30 cajas. "Ahora lo mínimo que van son 125 cajas, no porque anda el promedio en 200 cajas diarias de productos”, asegura.El aumento de la producción viene acompañado de una expansión a 10 manzanas que administra el productor junto a su familia, incluso una de sus hijas estudió contabilidad para estar al frente de las cuentas del negocio. Sin embargo, Tadeo Hernández reconoce que logró crecer porque tenía aseguradas las compras y eso le permitió escalonar la producción."Hacemos un plan. Por lo menos, ahorita ya tenemos un plan para la venta navideña y tenemos un presupuesto porque aumenta el promedio entre el 16 y 24 de diciembre como en 1,000 cajas diarias de productos”, afirma el productor. El 69 % de las adquisiciones locales que realiza Walmart para sus diferentes formatos de tiendas corresponde a proveedores de Tierra Fértil, con compras que superaron los $5.5 millones en 2020. "Le garantiza al proveedor un pago justo y a tiempo, elimina los intermediarios y les apoya para que puedan mejorar la calidad de sus productos”, indica Ana Fran Villatoro, encargada del programa para Centroamérica.
Lavado de las hortalizas antes de enviarse a la planta de procesamiento. / G.A.
Una cadena.
Es casi mediodía y aún se visualizan cortadores bajo el horizonte del volcán de Izalco. Tadeo Hernández explica que siempre hay personas revisando los cultivos o preparando la tierra para resembrar, pero las personas encargadas de sacar los pedidos inician las cortas antes de las seis de la mañana.Las hortalizas se trasladan luego a un cuarto de lavado, ubicado junto a la casa del productor, donde un grupo de trabajadores limpian y empacan los productos. Luego se colocan en cajas y se envían a la planta de Walmart, Hortifruti, ubicada en un parque industrial de Santa Tecla, carretera a La Libertad.En este proceso participan 24 personas, todos de la localidad, entre un 50 % hombres y 50 % mujeres.