Las entidades sancionadas son CIBanco, Intercam y Vector, a las que se les prohíbe realizar ciertas transacciones financieras debido a su presunto papel clave en el blanqueo de millones de dólares provenientes de actividades delictivas. Según el Tesoro, estos bancos habrían facilitado pagos para adquirir precursores químicos utilizados en la elaboración de fentanilo.
“Estas entidades han desempeñado un rol vital y prolongado en el lavado de fondos para cárteles con sede en México”, detalló la institución en un comunicado oficial. Las operaciones habrían contribuido al abastecimiento de sustancias que alimentan la epidemia de opioides en Estados Unidos.
El secretario del Tesoro, Scott Bessent, fue tajante al señalar que estas entidades financieras “están colaborando con los cárteles en el suministro de fentanilo y facilitando el envenenamiento de innumerables estadounidenses”.
Esta es la primera acción de este tipo adoptada por la Red de Control de Delitos Financieros (FinCEN), bajo la nueva legislación aprobada por el Congreso de Estados Unidos para frenar el flujo de drogas sintéticas como el fentanilo.
Washington también destacó la cooperación de las autoridades mexicanas en la implementación de estas sanciones, y subrayó la importancia de la “sólida relación” bilateral para combatir tanto el lavado de activos como las redes que financian el terrorismo.