Feligreses recuerdan a monseñor Romero en su 106 aniversario de nacimiento

Fieles creyentes de la iglesia católica asistieron ayer a la tumba de monseñor Óscar Arnulfo Romero y Galdámez, en la cripta en Catedral Metropolitana para conmemorar su 106 aniversario de nacimiento y recordar al santo salvadoreño que representó una figura de lucha por los más vulnerables durante el conflicto armado, hasta su martirio. Con una radio en sus manos, Edelmira Orellana de 77 años de edad llegó temprano a la cripta, con emoción colocó cánticos al pie donde ahora descansan los restos de Romero. "Hoy está cumpliendo años Romero y le vine a poner serenatas de alabanzas porque yo lo quería mucho, me siento realizada que ya cumplí mis deseos. En mi juventud fui rebelde y cambié cuando empecé a escuchar las homilías de él, yo quisiera que estuviera vivo él y abrazarlo”, expresó Edelmira. Otra de las personas que visitó ayer la tumba del arzobispo fue Margarita Alfaro, ella recordó haber conocido a Romero cuando oficializó una misa en la Escuela Marie Paul, donde ella estudiaba y desde ese momento sintió una admiración por el santo y su mensaje de paz. "Yo recuerdo haber visto un sacerdote vestido de blanco con una cinta rosada en la cintura, ahí se sentía la presencia de Dios porque era alegría aunque uno no lo conocía. Él nos enseñó y nos sigue enseñando que debemos retornar al pensamiento de Dios y en los jóvenes que vuelvan a esa solidaridad”, manifestó Margarita. La feligrés enfatizó que "hay que recordar lo que Romero decía: ‘que no fuéramos masa, que fuéramos pueblo, alguien quien piensa y razona”. Asimismo, Berta Vásquez de 73 años relató haber participado en el funeral de Romero en Catedral, día que asesinaron a decenas de personas fuera de la iglesia. "Todavía contamos el cuento, mucha gente desperdigada, mucha gente muerta, yo andaba con mis dos niños y ya cuando nos íbamos empezaron los disparos, la gente corría, otra pasaba encima de otros, yo recuerdo haber dicho ‘San Óscar defiéndenos’, eso fue terrible”, contó Berta. La creyente aseguro que asiste todos los años a la cripta en el marco del nacimiento y muerte de Romero y recuerda las enseñanzas del santo, "él nos enseñó a hablar siempre con la verdad”. San Óscar Arnulfo Romero nació un 15 de agosto de 1917 en Ciudad Barrios, San Miguel y fue asesinado el 24 de marzo de 1980 mientras celebraba una eucaristía en la Capilla del Hospital de la Divina Misericordia en San Salvador. Previo a su aniversario del natalicio, feligreses participaron en la quinta peregrinación a la cuna del profeta, en San Miguel, donde recorrieron más de 100 kilómetros, desde la capital.