Hondureños protestan contra las ZEDES, zonas de inversión con gran independencia

Lunes 30, Agosto 2021 - 4:57 PM

Las "Zonas de Empleo y Desarrollo Económico" o ZEDES serían regiones que se "autogobernarían" bajo un estatus diferente al resto del territorio hondureño, lo que sus críticos consideran una concesión del territorio.

La gente protesta contra el gobierno del presidente hondureño Juan Orlando Hernández y contra las Zonas de Empleo y Desarrollo Económico (ZEDES) -nuevo tipo de división administrativa- en Tegucigalpa, el 30 de agosto. Orlando SIERRA / AFP
Miles de hondureños protestaron este lunes contra el gobierno en demanda de la derogación de las Zonas de Empleo y Desarrollo Económico (ZEDE), una especie de ciudades con soberanía para que empresarios inviertan con beneficios fiscales y que, según diferentes sectores, violan la Constitución."No a la destrucción de Honduras", "No a la entrega de la soberanía", "No a la venta del territorio porque viola la soberanía", se leía en mantas y pancartas que llevaban más de 5.000 personas por el bulevar Suyapa de la capital, en la mayor concentración desde el comienzo de la pandemia en Honduras, según un analista. La movilización fue convocada por una coalición de organizaciones sociales, docentes, estudiantes, sindicatos, Colegio de Abogados y otros gremios.La marcha, que terminó frente al Poder Judicial, se llevó a cabo junto a otras protestas convocadas en diferentes ciudades del país en forma simultánea.El gobierno de Juan Orlando Hernández promueve las ZEDE para instalar emporios industriales con facilidades extremas para los inversionistas, que pueden crear "zonas fiscales y aduaneras extraterritoriales, distintas a las del resto del territorio nacional".La ley les permite igualmente crear "órganos de seguridad interna con competencia exclusiva en la zona, incluyendo su propia policía, órganos de investigación del delito, inteligencia, persecución penal y sistema penitenciario, así como la vinculación con la estrategia de seguridad del país".Las ZEDE son rechazadas por empresarios, iglesias, abogados, universidades y sindicatos por "inconstitucionales".El independiente Consejo Nacional Anticorrupción (CNA) considera que serían una suerte de santuarios para los funcionarios hondureños acusados de narcotráfico por la justicia estadounidense.El propio presidente Hernández es investigado por la fiscalía de Nueva York y su hermano fue condenado en Estados Unidos a cadena perpetua como narcotraficante "a gran escala".