Una inmigrante salvadoreña, residente en Houston, Texas; se enfrentó a un escenario devastador ocasionado por la tormenta tropical Harvey el pasado domingo con el único propósito de cumplir con sus compromisos laborales.Sin pensar en lo que le deparaba en su viaje, Gloria María Quintanilla, de 60 años de edad, emprendió su viaje en medio de la lluvia, encontrándose con calles convertidas en ríos.La compatriota caminó por más de una hora hasta su trabajo, atravesando calles donde el agua le llegaba hasta la cintura.Quintanilla contó a The New York Time que llegó a Estados Unidos en 1982 y que trabaja en un hotel de la ciudad, lavando y planchando sábanas y toallas."Fue mi día para trabajar, y yo soy una persona muy responsable", dijo, aunque confesó que "No tenía ni idea de que iba a ser así".Houston es la zona más afectada por las catastróficas inundaciones ocasionadas por el huracán Harvey, que ha dejado ya al menos 20 de fallecidos y miles de damnificados.El Gobierno de El Salvador expresó hoy sus condolencias y solidaridad al Gobierno de los Estados Unidos por las víctimas de Harvey.