League lanza campaña para financiar estudios superiores de salvadoreños
Martes 27, Marzo 2018 - 11:41 AM
League capta la atención de los Buffett y Carlos SlimAhora, una de las trabajadoras de LCA, Carly Gerstman, que llegó al país en 2014, está reuniendo más recursos para financiar los estudios superiores de estos trabajadores, a través de una petición en la página de financiación colectiva Gofundme.Puede realizar donaciones utilizando su tarjeta de crédito, o compartir la petición a través de redes sociales, entrando a esta página. La iniciativa se lanzó hace una semana y al cierre de esta nota ya había recaudado $1,260. ¿Cómo funciona?En febrero de 2016, LCA firmó una alianza con la Universidad Don Bosco para abrir un campus al interior de la fábrica. A dos años de este acuerdo, la primera promoción de 36 estudiantes ya está preparándose para la graduación.No obstante, hay más de 108 trabajadores y 154 niños en diferentes niveles de primaria y secundaria que tienen la esperanza de alcanzar sus estudios superiores en League, aseguró.El modelo empleado en esta fábrica, convertida hoy en centro de estudios, se desarrolla en Ciudad Arce, Santa Ana, en una zona franca. A través de numerosos programas sociales, como la reinserción de exmiembros de pandillas a la fuerza laboral, brindar empleos para personas con discapacidades físicas y educación gratuita hasta el bachillerato, LCA abre oportunidades para quienes más lo necesitan a través del trabajo y la educación. Según explicó Gerstman, el costo por cada estudiante es de $1,300 por año, un 36 % de su salario anual, sin incluir otros gastos como el transporte y materiales escolares."Mi meta actual es ayudarlos a cubrir la mitad de su matrícula, y si hay una respuesta positiva, elevar la meta actual para eventualmente cubrir el 100 % del costo", escribió en la petición. LE PUEDE INTERESAR: Ingresos de salvadoreños aumentan 9.3 % con un año extra de educación
La compañía League Central America (LCA), una fábrica estadounidense de prendas para universidades, está encargándose de reconstruir a través de la educación el futuro de cientos de jóvenes salvadoreños provenientes de comunidades de alto riesgo, exmiembros de pandillas e incluso con alguna discapacidad.En la fábrica que ensambla e imprime las camisas de unas 1,600 universidades estadounidenses, más de 500 trabajadores no han logrado finalizar su educación media. No obstante, si desean mantener su empleo, deben continuar sus estudios, explicó Rodrigo Bolaños, gerente de la compañía, al portal de noticias PBS.org.LEA TAMBIÉN: