En El Salvador hay más de 15,000 fincas distribuidas en seis cordilleras cafeteras, consideras el principal pulmón ambiental.
El Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) presentó a la Asamblea Legislativa la propuesta de creación del Instituto Salvadoreño del Café (ISC), que sería la máxima autoridad en el sector en investigación científica y transferencia de tecnología.El anteproyecto de ley, presentado la semana pasada al pleno legislativo, propone que este nuevo instituto será la máxima autoridad en la investigación científica, transferencia de tecnología y formación en temas del sector café en El Salvador.La nueva institución recibirá $10 millones de los $640 millones aprobados para la creación del Fideicomiso para el Rescate de la Caficultura (Firecafé), el fondo encargado de gestionar financiamiento para renovación del parque cafetero, créditos, reestructuración de deuda y asistencia técnica.
Un pedido de los productores.
Por años, los productores han pedido la creación de una institución técnica que apoye al sector a recuperar su producción y mejorar la calidad del grano, una labor que antes realizaba la Fundación Salvadoreña para la Investigación del Café (Procafe).Procafe se creó en 1990 para dar acompañamiento técnico a los productores y se mantenía con un aporte de $0.50 que hacían los productores por cada quintal oro de café exportado; sin embargo, el Consejo Salvadoreño del Café (CSC), bajo el mandato del expresidente Mauricio Funes, se adjudicó el derecho de trasladar o no los fondos y eventualmente la Fundación quedó en quiebra en 2011.En el caso del ISC, la ley establece que los ingresos estarán sujetos a las tasas y contribuciones especiales destinadas a la institución, asignaciones desde el presupuesto general del Estado e ingresos provenientes de la prestación de sus servicios.
Un instituto en medio de crisis.
La nueva institución llega en medio de una crisis de baja producción que el sector arrastra desde el 2012 por el ataque del hongo de la roya. Pese a que hay varios productores que han logrado mantener sus fincas, pequeños caficultores cayeron en insolvencia cuando en 2017 se desplomó el precio internacional.En ese contexto, el nuevo instituto será el encargado de investigar y desarrollar las tecnologías para la producción agrícola, acorde a las necesidades de los productores de café y las demandas del mercado nacional e internacional.La dirección y administración del instituto tendrá un consejo directivo integrado por ocho miembros, cuatro del sector público y cuatro del sector privado.Por el sector público estarán los ministros de Agricultura y Ganadería, y Medio Ambiente, el director del CSC y el presidente del Banco de Desarrollo de la República de El Salvador (Bandesal).Del sector privado, estará un representante y un suplente de los productores de café, de las asociaciones cooperativas, del ramo beneficiadores, pergamineros y catadores, además de la cadena torrefactores, intermediarios y exportadores.