El Senado de México aprobó este miércoles reformar su ley de Seguridad Nacional para limitar en el territorio las competencias de los agentes extranjeros, de agencias como la
DEA o el
FBI, quienes "únicamente" desarrollarán
"actividades de enlace" para intercambiar información con las autoridades mexicanas.La propuesta, una iniciativa del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, fue aprobada finalmente con 71 votos a favor, 21 en contra y una abstención, en medio de las críticas de la oposición, que han calificado la medida de
"berrinche" a causa de la reciente detención en suelo estadounidense del exministro de Defensa Salvador Cienfuegos.Así, el texto decreta que
las agencias extranjeras deberán operar en México bajo un tiempo definido y previa autorización, del mismo modo que están obligadas a hacer partícipes a las autoridades mexicanas de la información que recaben en el ejercicio de sus funciones, a través del Ministerio de Asuntos Exteriores.A su vez, la reforma da cabida a la posibilidad de que
los agentes extranjeros puedan ser sancionados penalmente bajo el marco jurídico mexicano, ya que no tendrán
"ninguna inmunidad en caso de incurrir en la comisión de delitos o infracciones", así como por infringir las disposiciones normativas que les prohíben el ejercicio de funciones reservadas a las autoridades de México.
Un "berrinche" por la detención de Cienfuegos
Sin embargo, desde la bancada del Partido Acción Nacional (PAN) han calificado la iniciativa del presidente mexicano de
"berrinche" y han asegurado que tendrá un "impacto negativo", puesto que
"ahorcará" tanto la colaboración
"que no se va a dar", informó el diario mexicano 'Milenio'.El pasado 15 de octubre, el general Cienfuegos, quien se desempeñó como
ministro de Defensa durante el sexenio de Enrique Peña Nieto (2012-2018), fue detenido en Los Ángeles, California,
acusado de narcotráfico y lavado de dinero.Bajo la 'Operación Padrino' del Departamento para el Control de Drogas (DEA) de Estados Unidos, los agentes estadounidenses han dicho
haber hallado indicios y testimonios de la relación de Cienfuegos con el que fuera director de la Secretaría de Seguridad Pública, Genaro García Luna, imputado actualmente por sus
supuestos vínculos con el crimen organizado.