Nuevos pasos fronterizos bajarán a 4 minutos el paso por aduanas
Las obras de Fomilenio II avanzan y se aceleran los procedimientos administrativos para hacer los pagos.
La inversión que desarrolla Fomilenio II en los puestos fronterizos de Anguiatú (Santa Ana) y El Amatillo (La Unión) prometen mejorar el flujo comercial de El Salvador.
La construcción de la nueva infraestructura de aduanas y migración de la frontera de Anguiatú (Guatemala-El Salvador) tiene un 40 % de avance.
El proyecto, financiado por Fomilenio II, promete agilizar el paso de mercancías y viajeros y reducir a tres y cuatro minutos los tiempos de espera poresta importante puerta para el comercio salvadoreño .
William Pleites, director ejective de Fomilienio II, dijo que con la inversión, que incluye la remodelación del paso de El Amatillo (El Salvador-Honduras) se agilizarán los tiempos y costos del transporte de mercancías.
"Para nosotros, particularmente, este proyecto de los recintos fronterizos es muy importante y emblemático. Siempre hemos sosntenido que El Salvador y Centroamérica tienen condiciones geográficas para convertirse en un centro productivo y logístico de importancia mundial”, dijo.
En ese sentido destacó que es necesario abatir los altos costos que no se dan por el estado de las carreteras, sino de los retrasos en aduanas.
Se estima que transportar una tonelada de carga por Centroamérica cuesta 17 centavos por kilómetro, cuando en Estados Unidos cuesta cuatro.
"Estamos convencidos que con estas inversiones El Salvador tendrá los dos recintos fronterizos más modernos de Centroamérica”, dijo Pleites.
El funcionario explicó que las inversiones avanzan satisfactoriamente tras lograrse los $50 millones de la contrapartida del Ejecutivo, un impasse que el año pasado obligó a paralizar los trabajos en cuatro proyectos.
El ministro de Hacienda, Alejandro Zelaya, dijo que están coordinados con Fomilenio II para ir entregando los pagos segúns se van completando los avances de los proyectos.
El fisco asignó los fondos al Ministerio de Obras Públicas y se van desembolsando en la medida que se cumplen tramos de las obras.
Solo el proyecto de Anguiatú se reconstruye a un costo de $16.2 millones y se pretende que su diseño y operatividad sirva de modelo para el resto de infraestructura de su tipo.