OEA condena regímenes de Nicaragua y Venezuela

Sábado 28, Julio 2018 - 12:00 AM
El gobierno venezolano tiene una "impronta criminal” muy difícil de vencer, manifestó el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, quien pidió también justicia y una salida democrática a la crisis política que vive Nicaragua.Venezuela "es un régimen que tiene una impronta criminal muy fuerte”, dijo Almagro en Panamá durante una cena con miembros de la Asociación Panameña de Ejecutivos de Empresa (Apede).Almagro denunció que "la familia del presidente (Nicolás Maduro)”, otros miembros del gobierno y destacadas figuras del chavismo, están acusados de "narcotráfico”, por lo cual Venezuela tiene "una lógica criminal” que hace que sea "muy difícil revertirlo”.La pasada victoria electoral de Maduro ha sido desconocida por gran parte de la comunidad internacional. El gobierno venezolano y la oposición, con la mediación de los expresidentes José Luis Rodríguez Zapatero (España), Leonel Fernández (República Dominicana) y Martín Torrijos (Panamá) han protagonizado sin éxito varios procesos de diálogo.Ante empresarios panameños y el canciller encargado, Luis Miguel Hincapié, Almagro acusó también al gobierno venezolano de utilizar el diálogo para perpetuarse en el poder."Lo que ha quedado demostrado desde 2014 hasta ahora es que el régimen venezolano ha usado completamente cada una de las instancias de diálogo simplemente para consolidar el statu quo basado en la represión, el miedo, el terror, la miseria de la gente, la tortura y los presos políticos”, señaló Almagro.El secretario general de la OEA también se refirió a la crisis que atraviesa Nicaragua, dónde más de 300 personas han muerto durante protestas desatadas en los últimos 100 días contra el gobierno de Daniel Ortega, y pidió una solución "democrática” para salir de esa situación.Según Almagro, desde el principio la OEA ha pedido "soluciones institucionales y democráticas” a Managua porque "es el camino principal” para salir de la espiral de violencia que atraviesa el país."Tres meses después Nicaragua sigue necesitando una solución democrática y sigue necesitando cada vez más justicia” porque "ningún país puede ser sostenible basado en la represión”, ya que ese clima de confrontación aleja las inversiones y empeora la calidad de vida, advirtió Almagro. Obsesión al poderEl presidente ecuatoriano, Lenín Moreno, criticó ayer la "obsesión” por el poder, en alusión al mandatario nicaragüense Daniel Ortega, que enfrenta desde abril una ola de protestas exigiendo su salida."Eso es lo que se genera en el momento en que una persona se queda demasiado tiempo en el poder, en algún momento no se preocupan por el desarrollo del país, lo único que les obsesiona es el poder”, indicó Moreno durante un evento en una visita a Madrid, en respuesta a una pregunta sobre la crisis en Nicaragua, aunque sin nombrar directamente a Ortega."Hay que tener cuidado con la droga del poder”, sub­rayó Moreno, cuyo gobierno ha condenado la violencia en Nicaragua.