Cortesía Gobierno de Guatemala
El presidente de Guatemala, Alejandro Giammattei, y el vicegobernante Guillermo Castillo,
quien hace dos semanas le pidió que renunciaran juntos, llamaron este viernes al diálogo ciudadano para calmar la crisis por las denuncias de opacidad en la gestión del gobierno.Giammattei anunció en una conferencia de prensa que
desde la próxima semana se iniciarán mecanismos de "diálogo y concertación" con varios grupos de la sociedad para reorientar el presupuesto nacional de 2021, uno de los factores que llevó a miles de manifestantes a las calles para protestar y exigir la renuncia del presidente.El mandatario ya inició desde la semana pasada conversaciones con varios sectores, pero hasta el momento no se ha convocado a los pueblos indígenas, que representan el 43% de los casi 17 millones de habitantes del país.Los manifestantes demandaron la renuncia de Giammattei y de todos los diputados, porque consideraban que ese presupuesto no atendía los problemas más urgentes de Guatemala, como la pobreza, la salud y la educación. Al final el Congreso, de mayoría oficialista, debió anularlo.
Se trata de la primera aparición pública del mandatario desde que estalló la crisis hace tres semanas.
"No es el momento de diferencias, sino más bien de que juntos nos sentemos a trabajar por lo que más queremos: el bien común", añadió el vicepresidente, que el 20 de noviembre había pedido a Giammattei que renunciaran juntos "por el bien del país".Según el mandatario, el nuevo presupuesto estará orientado hacia la recuperación económica y la reconstrucción nacional tras los desastres que causaron los huracanes Eta e Iota, que azotaron Centroamérica en noviembre.Giammattei anunció también la disolución a partir del próximo 31 de diciembre del denominado Centro de Gobierno, una instancia implementada por él mismo para apoyar a los ministerios, pero que opositores acusan de ser innecesaria y de poder prestarse a malos manejos.
"Corrupción e impunidad"
Guatemala vivió tres semanas de intensas protestas antigubernamentales en las que incluso un grupo llegó a incendiar oficinas del Congreso en el centro de la capital. El sábado pasado también se prendió fuego a un autobús frente al Palacio Nacional.En el intento del gobierno por rebajar las tensiones, también se hará una evaluación de todos los ministros, viceministros y secretarios, aprovechando que, como es habitual cada fin de año en el país, deberán poner sus cargos a disposición.
Una misión de la Organización de Estados Americanos (OEA), que analizó la crisis entre el 27 de noviembre y el 2 de diciembre, recibió alarmas de distintos sectores sobre la corrupción e impunidad en Guatemala. La misión también recibió quejas sobre la transparencia en los asuntos públicos, la conformación del presupuesto de 2021 y el procedimiento legislativo opaco para su aprobación, detonante de las manifestaciones masivas.