Simulación de delito atribuido a Pignato se acumulará a caso de lavado de Funes

Viernes 25, Enero 2019 - 12:03 AM
Por este caso, Pignato no tiene medidas; el juez dijo que no había peligro de fuga. / Archivo DEM
El proceso penal por simulación de delito que la Fiscalía General de la República le sigue a la ex primera dama Vanda Pignato, fue remitido al Juzgado Séptimo de Instrucción de San Salvador para que se acumule al proceso conocido como "Saqueo Público”, donde también es procesada junto a Mauricio Funes y otros 30 imputados.Por economía procesal el juez Octavo de Instrucción, Mario Osmín Miramonte, tomó la decisión de enviar el expediente para que se unifiquen y sean conocidos en la audiencia preliminar.Según la Unidad de Prensa del Centro Judicial Isidro Menéndez, "los juzgadores resuelven la acumulación de los procesos, basados en los artículos 59 y 60 del Código Procesal Penal, que dice que cuando a una persona se le imputan uno o varios hechos aun cuando hayan sido cometidos en diferentes lugares o sea de distinta gravedad, cuando exista conexidad entre procedimientos será competente el juez o tribunal que conozca del hecho más grave”.El expediente fiscal por simulación de delito surge cuando en noviembre de 2016, Pignato llegó a la Fiscalía General a denunciar para que se investigara la falsificación de su firma.En su denuncia la ex primera dama dijo que en cuanto a un vehículo Lexus LX 570, todo terreno, año 2010, propiedad de Miguel Antonio Menéndez Avelar, mejor conocido como "Mecafé”, ella nunca lo había comprado por la cantidad de $60 mil y le pidió a la Fiscalía que indagara quiénes habían utilizado su firma para adquirir dicho carro.Según la Fiscalía, Pignato le manifestó al Ministerio de Hacienda que ella no tiene conocimiento sobre ese vehículo, adquirido por $60 mil y que ella no compareció a firmar ese documento de compraventa, y autorizó al Ministerio Público para que se investigara la supuesta falsificación de su firma.Según las investigaciones de la Fiscalía, dicho automotor "Mecafé” lo había adquirido en febrero de 2016, por un precio de $100 mil y ocho meses después, se lo vendió a Pignato por $60 mil y la Fiscalía dijo que las firmas sí eran de Pignato.