Una noche de besos en la frente para El Salvador

El pasado viernes 18 de noviembre, Jesús Adrián Romero deleitó al público cristiano salvadoreño con las composiciones de su más reciente producción "besos en la frente” (2016).Pasaban 45 minutos de las ocho de la noche cuando comenzó el espectáculo. La multitud precipitó sus aplausos y agradecidos por su llegada dispusieron el corazón.La ternura de su voz conquistó desde el primer momento a las familias quienes desde sus asientos abrazaron sus canciones como una dulce caricia al alma.El público ovacionó las nuevas canciones, "Que baje el cielo”, "Que huyan los fantasmas”, "Canción de cuna”, entre otras, mientras se mostraron fragmentos de los videoclips del nuevo repertorio.Diversas tonalidades de azules se apoderaron de las luces y del fondo del escenario equipado con cinco pantallas. El cantautor mexicano, de 51 años, subió al escenario vistiendo un traje azul negro que salvaguardó la pulcritud que caracteriza sus presentaciones. La canción de inicio fue "Soplando vida”, que forma parte de su cuarto álbum de estudio.La multitud emocionada le acompañó de principio a fin en un popurrí con los éxitos "Ayer te vi”, "El aire de tu casa”, "Este día especial”, y Mágicas princesas”.El juego de luces indicaba el momento justo en el que Romero entregaba las canciones para que fueran interpretadas desde las voces de los asistentes.El Salvador sonrió, lloró, meditó y coreó sus canciones a lo largo de las dos horas quince de espectáculo espiritual. Jesús Adrián Romero se despidió de sus seguidores a las 11 de la noche y fue cuando un show de fuegos artificiales se apoderó del cielo.