El Barcelona visita mañana al Atlético de Madrid en la 8ª jornada de Liga, sin margen de error y con su técnico Ronald Koeman en el alambre tras la debacle de Lisboa.

La goleada 3-0 sufrida ante el Benfica el miércoles en Champions ha vuelto a suscitar las dudas sobre el juego del Barça, que necesita puntuar en el Metropolitano.

El equipo azulgrana apunta en la 6ª posición liguera, a cinco puntos del líder, el Real Madrid, mientras el Atlético es 4º, a tres puntos de los merengues.

Los azulgranas no pueden permitirse más tropezones para no perder la estela de los equipos cabeceros, pero llegan al encuentro llenos de dudas y con Koeman muy tocado.

El técnico holandés, que no se sentará en el banquillo por estar sancionado, seguirá al frente del equipo contra el Atlético, pero nadie se atreve a predecir lo que puede pasar después, tras la pausa internacional.

 

Recuperar lesionados.


“De mi futuro no quiero decir nada porque no sé lo que piensa el club y no está en mis manos”, afirmaba Koeman tras el partido contra Benfica, admitiendo su precaria posición.

El Barça pone sus esperanzas en ir recuperando lesionados, a imagen de la vuelta de Pedri y Ansu Fati, que seguramente volverán a tener minutos en el Metropolitano.

Enfrente, el Atlético buscará retomar la senda de la victoria, tras encajar su primera derrota liguera el fin de semana pasado ante Alavés (19º) 1-0.

Los rojiblancos llegan al encuentro animados por su épica remontada el martes contra el Milan (2-1), protagonizada por Luis Suárez y Antoine Griezmann, que apuntan a ser los delanteros contra el Barça.

El primer gol de la temporada para Griezmann supuso toda una liberación para el francés, cuyo rendimiento estaba siendo muy cuestionado y una inyección de moral para encarar el partido contra su exequipo.

“Creo que noches como ésta me van a ayudar a mejorar”, afirmaba.

Una victoria del Atlético, que podrá volver a llenar su estadio al 100% tras la última decisión de las autoridades sanitarias españolas, podría devolver a los rojiblancos al podio liguero.